Música tradicional en todas sus formas. Monforte se despertó el domingo a ritmo de gaitas y de panderetas. La música tradicional gallega invadió todas las calles de la ciudad para empezar la segunda edición del Domingo Gaiteiro, organizado por Roi Maceda, de la Asociación de Gaiteiros Galegos, y el Ayuntamiento de Monforte. Cantigas e Frores, A Gaita de Sarandón, Carlos do Viso, Os Trazantes, Iván Costa, Os Fiuzas de Montealto, Gomes Mouro, Peleriños, Os Monfortinos y el grupo de gaitas del Ayuntamiento recorrieron calles y bares poniendo a bailar a todos los que por allí pasaban. Por la tarde se celebró el festival de música y baile tradicional en la Praza de España, que terminó con parte del público bailando sobre el escenario con los músicos. Una día de difusión y homenaje a la riqueza de la música tradicional gallega.
La Compañía se llenó con el concierto de Coti. El argentino Coti reunió en la Compañía a cientos de personas de todas las edades el domingo a la noche, aunque las primeras filas se llenaron de jóvenes. La actuación estuvo cargada de guiños a los gallegos y de comentarios sobre su relación con los argentinos. Coti agasajó al público incluso con una versión del mítico Miña Terra Galega, de Siniestro Total.
Pancetada en Quiroga. La Comunidad de Montes A Conchada, que reúne a las parroquias quiroguesas de Caspedro, Barca do Castelo y San Martiño, celebró el viernes una cena en la plaza de la Constitución, con la que se inician las fiestas. Para la ocasión se prepararon trescientos kilos de panceta, doscientos de salchichas asadas, ciento veinte bollos de pan y vino en abundancia.
Dando color al ladrillo. Una de las formas de terminar con el feísmo es el arte. Parece que en el Ayuntamiento de Ribas do Sil también pensaron en ello cuando contrataron a tres licenciados en Bellas Artes para decorar con grafitis un muro, situado al lado del anfiteatro de la playa fluvial.