La Central Sindical Independiente de Funcionarios (CSIF) respondió ayer a las manifestaciones realizadas por la concejala de Personal, María Xosé Vega, sobre las conversaciones para la catalogación de puestos del Ayuntamiento de Monforte. El sindicato señala que participó, al igual que otros, en el debate de las propuestas planteadas por la Universidad de Vigo a instancias del gobierno municipal, pero sostiene que los acuerdos «no se reflejaron en el acta correspondiente en los términos negociados». Por este motivo, sus representantes no acudieron a la reunión del pasado 28 de diciembre, en la que fue firmado el acuerdo definitivo sólo por dos sindicatos (UGT y CIG). Las dos centrales que no lo hicieron, CC.???OO y CSIF, destaca esta última «ostentan el cien por cien de la representatividad de los funcionarios en el ayuntamiento». «La no firma se debió, además de a la ya indicada falta de rigurosidad en la redacción del acta, a las muchísimas quejas sobre la valoración que recibimos de la práctica totalidad de los departamentos», añade la central independiente. Según su criterio, María Xosé Vega falta a la verdad cuando asegura que la catalogación de puestos tuvo el apoyo de un 75% de la representación de los trabajadores. «¿Cómo puede incitar a la Policía Local a que pida cuentas a los sindicatos firmantes del catálogo de puestos si éstos no tienen ninguna representación entre los funcionarios?», se pregunta el CSIF, que exige a la concejala que ponga los medios para resolver los problemas de los trabajadores en vez de recurrir a «engaños». La central precisa que no se ha posicionado hasta ahora para dejar claro que sus puntos de vista no son un ataque político a la concejala, que fue candidata por Lugo en las últimas autonómicas. Entre los problemas más acuciantes del Ayuntamiento en materia laboral están, desde su punto de vista, el reglamento de la Policía Local y los bomberos, la regularización de la segunda actividad, el cobro de dietas por trabajo a turno o los derechos de fondos de acción social. El CSIF alude, asimismo, en su tabla reivindicativa a la provisión de ropa y calzado de uso obligatorio «de manera global y puntual» en aquellos casos en los que resulte necesario y a la compra de munición para prácticas de tiro de los agentes de la Policía Local. Próximanente, presentará un escrito en el ayuntamiento pidiendo que se cumplan los acuerdos alcanzados en la negociación y que no quedaron reflejados finalmente.