El método Ucmas desarrolla el pensamiento abstracto y mejora la concentración
21 nov 2012 . Actualizado a las 12:49 h.Motivar. Palabra mágica que encierra el mandamiento de que el profesor saque lo mejor de cada alumno (hay que motivar), pero muchas veces también clave de sus frustraciones (qué difícil es motivar hoy en día, y sin la ayuda de las familias tantas veces). Motivar sí, pero ¿cómo bajamos a la realidad con este alumnado que tan fácilmente pierde la concentración?
Ucmas tiene una respuesta que ofrecer a esta pregunta. Quizá no la definitiva, pero sí interesante y probada. Ucmas es el nombre de un método que estimula el desarrollo intelectual del niño, su capacidad de concentración y de mantener la atención, su memoria, su autonomía y su creatividad. Se puede impartir entre los 5 y los 13 años, etapa de mayor plasticidad del cerebro, cuyo empleo global, es decir, de los dos hemisferios, se potencia. El único requisito que se exige del alumno es que sepa contar del 0 al 9. Y, aunque en Galicia muchos colegios lo ofrecen como complemento extraescolar, también puede integrarse en el currículo reglado.
NO HAY MISTERIOS
¿Y cuál es el ingrediente secreto del método Ucmas? Pues un sencillo y ancestral ábaco. No el conocido de todos, sino un ábaco hindú con el que se opera, y este es una de las claves del método, en base 5. Y al decir opera queremos significar que este ábaco sirve para algo más que contar, pues también permite hacer eso: operaciones, como sumar o multiplicar, hasta más de una treintena.
A partir de diversos juegos cuya base es la interacción en grupo, con el tiempo se va abandonando el ábaco material y se sustituye por una imagen mental, pues el pensamiento por imágenes mejora la comprensión y la memoria.
El programa completo dura 3 cursos escolares (4, en niños que empiezan a los entre 5 y 7). Desde el principio resultará útil al estudiante -al que después le bastará con la ayuda de sus padres, cuya participación es esencial para el éxito del método- y con un corto entrenamiento diario de entre 5 y 10 minutos, preferiblemente antes de comenzar las tareas escolares, para comprobar su eficacia.