Milei amenaza a la oposición tras la caída de su ley ómnibus en el Congreso argentino

Cecilia Valdez BUENOS AIRES / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

Milei, el miércoles durante su visita al Museo del Holocausto, en Jerusalén.
Milei, el miércoles durante su visita al Museo del Holocausto, en Jerusalén. ABIR SULTAN | EFE

El ultraliberal publicó en redes una lista de diputados «traidores y leales», según sus votos en la sesión de la Cámara Baja

08 feb 2024 . Actualizado a las 09:18 h.

Javier Milei sufrió, el martes por la noche, la primera gran derrota de su mandato cuando la «oposición dialoguista» le quitó su apoyo en la votación artículo por artículo de la ley ómnibus, con la que el presidente pretende llevar a cabo una reforma del Estado inédita. La ley, que había sido aprobada de modo general el viernes pasado, ahora volverá a comisión y el trámite a su punto de partida. Mientras tanto, Milei continúa de gira por Israel, donde ayer se entrevistó con Benjamin Netanyahu.

«Nazismo moderno»

«Di la orden de levantar el proyecto», señaló el ultraliberal desde el Estado judío. Por la tarde visitó el Museo del Holocausto, después de mantener una reunión con Netanyahu en la que le manifestó el apoyo político argentino a Israel en el conflicto que mantiene contra Hamás. Con un breve discurso, Milei condenó al grupo yihadista, al afirmar que representan el «nazismo moderno», y reafirmó su decisión de trasladar la embajada argentina de Tel Aviv a Jerusalén. El presidente Isaac Herzog celebró a través de las redes sociales ambas decisiones.

Pero a la vez que todo esto sucede, Milei trata de digerir el duro golpe que implica para sus planes de gobierno lo sucedido en Buenos Aires. En la reunión que mantuvo con algunos empresarios israelíes dejó traslucir su enfado: «Ayer [por el martes], en la sesión de la Cámara de Diputados, la casta política —como nosotros llamamos a ese conjunto de delincuentes que quieren una Argentina peor porque no están dispuestos a ceder sus privilegios— empezó a descuartizar nuestra ley», sostuvo. En la madrugada del miércoles, Milei publicó en sus redes sociales una lista de diputados «traidores y leales», según su voto en la sesión de la Cámara Baja. «Pasen y vean a los enemigos de una mejor Argentina», escribió.

Desde el Gobierno nacional también acusaron a los gobernadores de destruir la iniciativa del poder Ejecutivo, y tanto los diputados como las provincias salieron a responder al ataque. Nicolás Massot, de Hacemos Coalición Federal —que, junto a la Unión Cívica Radical (UCR) y a Propuesta Republicana, forma parte de la «oposición dialoguista»—, expresó su malestar por la difusión del listado y le recordó a Milei que tanto las autoridades de la Cámara como las del Ejecutivo estaban al tanto de los puntos que no iban a acompañar.

«Falta de pericia»

«Este traspié parlamentario es exclusivamente responsabilidad de su falta de pericia, falta de diálogo y nula vocación por construir consensos. Se perdió la oportunidad de sancionar una ley que tenía puntos muy valiosos para Argentina y que nosotros acompañamos desde el primer momento a pesar de nuestras críticas como oposición responsable y democrática», indicó. 

Muchos atribuyen la derrota de la propuesta a la falta de experiencia de un Gobierno que, a pesar de que es minoría en ambas Cámaras, reniega de las negociaciones y el diálogo que le podrían permitir alcanzar consensos. De esa sola manera se puede explicar que los libertarios, a pesar de no haber alcanzado un acuerdo en puntos tan sensibles como los referidos a las privatizaciones de las empresas públicas, las reformas a la ley de reestructuración de la deuda externa y el agravamiento de penas para limitar las protestas sociales, hayan decidido avanzar con la votación. Solo reaccionaron cuando vieron que gran parte del Congreso las rechazaba, y cuando ya no les quedaban más opciones que devolver todo al punto de partida.

¿Y ahora qué? Un reinicio y una consulta popular

Después de que la Cámara Baja haya levantado la sesión del miércoles, el proyecto de la ley ómnibus volverá a comisión, o, lo que es lo mismo, a «foja cero», a su punto de partida. Así lo establece el artículo 155 de esa Cámara y así lo anunció el ministro del Interior, Guillermo Francos, que también indicó que el Gobierno todavía no ha decidido si continuar con el tratamiento de la ley o escribir otra desde el principio. El portavoz presidencial, Manuel Adorni, afirmó por su parte que «se está evaluando» la posibilidad de llevar adelante una consulta popular no vinculante con la idea de arrinconar al Parlamento.