Netanyahu amenaza a Teherán con una acción militar directa

colpisa BERLÍN

INTERNACIONAL

Lennart Preiss | dpa

Despliega en la cumbre de Múnich su discurso más beligerante

19 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Con una intervención agresiva y espectacular, en la que amenazó directamente al régimen de Teherán con una intervención militar, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, se erigió en protagonista de la jornada de clausura de la Conferencia de Seguridad de Múnich. Netanyahu afirmó que Irán «es el mayor peligro para el mundo» y advirtió a sus gobernantes de una reacción masiva por parte de su país en el caso de que Teherán trate de ampliar y afianzar su presencia en Siria o Líbano, países en los que apoya al régimen de Bachar el Asad y a las milicias chiíes de Hezbolá, respectivamente.

«Israel no permitirá que Irán nos ponga la soga al cuello», afirmó el primer ministro del Estado hebreo desde el estrado de la conferencia, a la que asistía también el ministro iraní de Exteriores, Mohamed Yavad Zarif. «Señor Zarif, ¿reconoce esto? Debería, es suyo», dijo Netanyahu ante el asombrado público a la vez que alzaba con su mano derecha lo que aseguró ser un trozo de un dron persa derribado sobre territorio de Israel. Tras abatir ese artefacto, la fuerza aérea israelí realizó hace una semana varios ataques aéreos en Siria contra posiciones sirias e iraníes. La pasada noche practicó en la Franja de Gaza los bombardeos más fuertes desde la guerra del 2014 contra fuerzas de Hamas, respaldado igualmente por Irán, en el transcurso de los cuales murieron dos jóvenes.

«Puede llevar un mensaje a los tiranos de Teherán: no pongan la firmeza de Israel a prueba. No nos reten», dijo el primer ministro israelí dirigiéndose al jefe de la diplomacia iraní, aunque este se ausentó de la sala durante su discurso. Aseguró además que su país no aceptará «una presencia militar permanente» de Irán en Siria. «No permitiremos que Irán construya una nueva base terrorista que resulte una amenaza para nosotros», afirmó Netanyahu, quien advirtió de que «si es necesario» Israel no luchará solo contra los representantes de Teherán en la región, sino que «atacará al propio Irán». Igualmente insistió en denunciar la supuesta peligrosidad del programa nuclear iraní, pese al acuerdo suscrito con Occidente para su limitación.

Netanyahu aprovechó el escenario internacional para distraer sus problemas caseros, con un grave escándalo por corrupción y denuncias de la policía en su contra. Por su parte, el jefe de la diplomacia iraní calificó de «circo de tebeo» la intervención y comentó que las palabras de Netanyahu «no se merecen una respuesta». Zarif acusó a Israel de invadir permanentemente el espacio aéreo de Siria y señaló que espectáculos como el del primer ministro agitando una pieza de metal en la conferencia solo tienen como fin tapar los problemas internos en su país, en clara alusión a las acusaciones de corrupción en Israel.