Berlín se implica más en la guerra contra el EI con una base en Turquía

Patricia Baelo BERLÍN / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

ADEM ALTAN | AFP

Las instalaciones que construirá en Incirlik costarán unos 65 millones de euros

27 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Alemania concreta cada vez más su viraje en política exterior, azuzada por la amenaza yihadista y los pedidos de ayuda de Francia y Estados Unidos. El Gobierno de Angela Merkel quiere tener presencia militar permanente en Turquía, para poder combatir más fácilmente a los terroristas de Estado Islámico en Siria e Irak. Para ello, la Bundeswehr (las fuerzas armadas alemanas) construirá un centro de operaciones militares en la base turca de Incirlik, desde donde podrá desplegar hasta 400 soldados acompañando a sus Tornados, según anunció ayer el Ministerio de Defensa confirmando las informaciones difundidas por la prensa alemana.

El proyecto, que contará con zona de control aéreo, alojamiento, puesto de mando para la coordinación de misiones y área de recreo, va a costar unos 65 millones de euros y podría estar terminado en el verano del 2017. Berlín negocian ya con Ankara un acuerdo bilateral que permita la presencia permanente de los militares germanos en Turquía, que exigen además que las labores de construcción sean llevadas a cabo por empresas locales por motivos de seguridad.

El ministerio intentó rebajar el estatus de las instalaciones, «no puede considerarse una base militar», dijo. Las críticas de parte de la oposición no se han hecho esperar. «Teniendo en cuenta que la misión contra el Estado Islámico fue muy precipitada, parece que la ministra de Defensa, Ursula von der Leyen, quiere quedarse en Incirlik mucho tiempo», denuncia el político ecologista Tobias Lindner.

En diciembre, Angela Merkel accedió a la petición que le envió François Hollande tras los atentados del 13N en París, al aprobar la participación de la Bundeswehr en la campaña militar contra Estado Islámico en Siria. Desde el 8 de enero, cuenta con seis aviones de reconocimiento tipo Tornado, un avión cisterna y 200 soldados instalados de manera provisional en la base turca de Incirlik, gestionada por la OTAN.

El Ejército alemán también está presente, aunque con tropas de entrenamiento, en el norte de Irak y en Mali. Sin embargo, ante la posibilidad de que la misión de la coalición internacional contra el EI se prolongue durante más tiempo, y el llamamiento de Estados Unidos a intensificar la lucha terrorista y reforzar la presencia militar en Siria, los expertos del Ministerio de Defensa han decidido no defraudar a sus socios y levantar instalaciones propias sobre el terreno.

Defensa cibernética

Paralelamente, von der Leyen informó ayer de la creación de una nueva unidad de defensa cibernética, que aspira a convertirse en la sexta división de la Bundeswehr. Contará con 13.500 miembros, entre militares y civiles, para garantizar la seguridad nacional ante el creciente número de ataques de esta índole que sufre Alemania (unos 6.500 al día).