Los presidentes de Colombia y Venezuela llaman a consultas a sus embajadores y se culpan mutuamente de los problemas
29 ago 2015 . Actualizado a las 05:00 h.La crisis fronteriza entre Colombia y Venezuela se crispó ayer tras ser llamados a consultas los embajadores de ambos países, mientras se agrava la situación de desabastecimiento en el departamento colombiano de Norte de Santander, especialmente de combustibles. El presidente del Parlamento venezolano, Diosdado Cabello, que había advertido de que esto iba a suceder, repitió las exigencias al país vecino de que «prohíba el contrabando». Según la cadena estatal Telesur, la gasolina suponía el 80 % del estraperlo en Cúcuta, capital de Norte de Santander.
Caracas sigue elevando la tensión con el país vecino. En una manifestación en apoyo al decreto de cierre de la frontera bajo el lema «por la paz y contra los paramilitares», Cabello y el vicepresidente del Gobierno, Jorge Arreaza, arengaron a los militantes del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) en tono beligerante. Para Arreaza, «es un descaro que el alcalde de Cúcuta, Donamaris Ramírez, diga que la falta de gasolina y alimentos es culpa de Venezuela», pues tras el cierre de la frontera, que ayer cumplió nueve días, «han comenzado a aparecer los productos en los pueblos [venezolanos] de San Antonio y Ureña».
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, llamó a consultas a su embajador en Bogotá, Iván Rincón, y anunció que va a «revisar integralmente las relaciones con Colombia». Se trataba de dar respuesta a la misma medida adoptada por su homólogo colombiano, Juan Manuel Santos, que había llamado a consultas a su embajador en Caracas, Ricardo Lozano, porque no podía «permitir que Venezuela trate a los colombianos y al Gobierno de esa manera».
A pesar de que estas medidas tensan el enfrentamiento diplomático, la canciller María Ángela Holguín ratificó que Colombia «no ha pensado en romper relaciones con Venezuela», aunque matizó que «el procedimiento llevado por Venezuela es completamente equivocado».
Convocatoria de Unasur
Santos reunió de urgencia a su Gabinete. El presidente de Colombia sigue apostando por la solución dialogada y pidió la convocatoria extraordinaria de los cancilleres de Unasur (Unión de Naciones Sudamericanas) y de la OEA (Organización de los Estados Americanos), que las autoridades venezolanas respeten los derechos humanos de los colombianos deportados, así como que puedan regresar a recoger los bienes dejados atrás.