Los ucranianos se negaron a que dentro del grupo de negociación tuvieran un lugar los prorrusos
18 nov 2014 . Actualizado a las 20:46 h.Rusia rechazó este martes una propuesta de Ucrania de dialogar sobre el conflicto en el este del país sin la presencia de los separatistas, mientras la OTAN acusó a Moscú de reforzar su poderío militar tanto dentro del país vecino como junto a la frontera. «Invitamos a la Federación Rusa a mantener serias negociaciones en territorio neutral», aseguró el primer ministro ucraniano, Arseni Yatseniuk, según medios locales. El jefe de gobierno propuso un diálogo que incluyera a Estados Unidos y la Unión Europea, pero no a los líderes separatistas.
Pero Rusia rechazó rápidamente la iniciativa. El ministro de Exteriores, Serguei Lavrov, consideró que Ucrania debería mantener conversaciones directas con los insurgentes del este del país y no con Moscú. Lavrov consideró además que debe mantenerse el formato del grupo de contacto integrado por representantes de Rusia, Ucrania, los separatistas del este y la OSCE.
Durante una visita a Minsk, Lavrov consideró que la capital bielorrusa es «el lugar óptimo» para nuevas consultas sobre la crisis en Ucrania y propuso que el diálogo continúe allí. «No existe otra vía para solucionar la crisis», dijo Lavrov.
Más tarde, al recibir en Moscú a su homólogo alemán, Frank-Walter Steinmeier, Lavrov advirtió al gobierno ucraniano de tomar «medidas unilaterales». «A muchos - y no solo a Kiev- les interesa decidir sobre el destino de Ucrania sin aquellos que viven en el este del país», manifestó el jefe de la diplomacia rusa, que consideró «una provocación» que se le imponga algo a la población de esa región.
En tanto, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, acusó este martes a Rusia de un «grave aumento de su poderío militar» tanto dentro del este de Ucrania como en la parte rusa de la frontera. «Vemos movimiento de tropas, de equipamiento, de tanques, de artillería y también de avanzados sistemas de defensa antiárea», dijo Stoltenberg antes de reunirse en Bruselas con los ministros de Defensa de la Unión Europea (UE). «Instamos a Rusia a retirar sus fuerzas del este de Ucrania y a respetar los acuerdos de Minsk», agregó. «Rusia tiene que elegir. Puede ser parte de una solución negociada o continuar por la senda del aislamiento», advirtió Stoltenberg.
El ministro de Exteriores alemán defendió el acuerdo de alto el fuego en Ucrania alcanzado el pasado septiembre en Minsk, frente a las críticas del gobierno de Kiev, y llamó a las dos partes a cumplirlo. Los acuerdos de alto el fuego no son perfectos, pero constituyen una buena «base de referencia», señaló Steinmeier en Kiev, tras un encuentro con el presidente ucraniano, Petro Poroshenko, y el primer ministro Yatseniuk, a quienes ofreció su apoyo.
Steinmeier advirtió de una «gran confrontación militar». «La situación de la seguridad es precaria, el alto el fuego frágil y el tono se ha endurecido en los últimos días», advirtió.
El gobierno de Kiev argumenta que los acuerdos firmados en septiembre en la capital bielorrusa están prácticamente muertos y acusa de ello a los rebeldes prorrusos y también a Moscú. Porohsenko entregó a Steinmeier una lista de supuestas violaciones de los acuerdos cometidas por Moscú. «Rusia no ha cumplido ni un solo criterio», dijo, señalando como ejemplos el cierre de la frontera ruso-ucraniana y la retirada de las tropas rusas de Ucrania. Moscú sin embargo niega las acusaciones de Occidente de haber enviado tropas y armas para apoyar a los separatistas. También Yatseniuk responsabilizó a Rusia y a los separatistas de la ruptura de los acuerdos.
Lavrov, por su parte, consideró que los acuerdos de Minsk «no son ideales». «Pero es lo único concreto de lo que disponemos actualmente y en lo que intervinieron todas las fuerzas decisivas», señaló durante la visita de Steinmeier, en el primer viaje del ministro alemán a Rusia desde la anexión de la península de Crimea el pasado marzo.
Antes del encuentro, el ministro ruso dijo que apreciaba «el diálogo regular con Alemania y otros países de la UE». Lavrov apuntó que pese a las sanciones europeas y estadounidenses contra Moscú espera una mejora de las relaciones con la UE. «Esperamos no haber alcanzado el punto de no retorno», señaló.
La misión alemana se produce después de que los líderes occidentales y el presidente ruso, Vladimir Putin, no lograran hacer progresos para resolver el conflicto durante la cumbre del G20 celebrada el fin de semana en Brisbane, en Australia. En una entrevista emitida el lunes, Putin dijo que no permitirá que el Ejército ucraniano derrote a los separatistas.
Mientras tanto, sigue la violencia en Donetsk y Lugansk, con nuevos enfrentamientos en los que murieron al menos seis soldados, informó el Consejo de Seguridad en Kiev. En el conflicto ya han muerto más de 4.000 personas desde abril.