La prensa francesa interpreta que la estrategia de Sarkozy de presentarse como víctima de la Justicia prueba, de hecho, su decisión, de regresar al primer plano de la política. «Para volver de mejor manera Nicolas Sarkozy se victimiza», tituló Le Monde. Su actitud evoca la del exjefe de gobierno italiano Silvio Berlusconi, afirmó Libération.
Un punto en común con Berlusconi es que Sarkozy «no se presenta solo como víctima, sino también debilitado para despertar compasión», afirma Pierre Musso, profesor universitario y autor de un libro titulado El sarkoberlusconismo. «Asistimos a una italianización de las relaciones entre la política y la justicia», considera también Marc Lazar, profesor en el Instituto de Ciencias Políticas de París. Esta táctica puede resultar eficaz para reunir a su alrededor a los simpatizantes de la UMP, entre los que sigue gozando de una «gran corriente de simpatía».