La ley de sucesión al trono británico pasa su último trámite parlamentario

EFE

INTERNACIONAL

El texto, que permitirá al primogénito de los duques de Cambridge reinar con independencia de su sexo, deberá ser sancionado por la reina Isabel II

22 abr 2013 . Actualizado a las 22:45 h.

El proyecto de ley de sucesión a la corona británica, que permitirá al futuro primogénito de los duques de Cambridge reinar con independencia de su sexo, pasó hoy su último trámite parlamentario al ser aprobado en la Cámara de los Lores.

El texto, que deberá ser sancionado por la reina Isabel II de Inglaterra antes de convertirse en ley, ha completado su periplo parlamentario en apenas tres meses, después de que se presentara el texto original ante los diputados el pasado 13 de diciembre.

La nueva norma eliminará el principio de primacía del varón para reinar, vigente desde hace más de 300 años, y permitirá, además, que los miembros de la familia real se casen con católicos sin que ello les suponga ser apartados de la línea de sucesión -considerando que el monarca inglés es cabeza de la Iglesia anglicana-.

Ahora, el futuro hijo de los duques de Cambridge, Guillermo y Catalina, que nacerá en julio, ocupará el tercer puesto en la línea de sucesión sea niño o niña y, en este último caso, tampoco se le privará de su derecho a ocupar el trono aunque tenga un hermano más joven.

Si naciera una niña, ésta tendrá tratamiento de princesa, según dispuso la propia Isabel II.

La nueva ley de sucesión completa así su recorrido en un tiempo récord ya que, pese a que el primer ministro británico, David Cameron, prometió una modificación de la norma en octubre de 2011, el anuncio del embarazo de la duquesa de Cambridge, a comienzos del pasado diciembre, ha acelerado su desarrollo.

Apenas se reabrió el calendario parlamentario, el texto inicial llegó a la Cámara de los Comunes el 22 de enero, y fue aprobado sin ninguna enmienda, tras lo que se trasladó el debate a los Lores.

La reforma de la ley sucesoria cuenta con el apoyo de la casa real británica, según ha asegurado Cameron.