Serbia llevará a la Justicia a los que ayudaron a Mladic a escapar

Katarina Subasic BELGRADO / AFP

INTERNACIONAL

El militar pide calma a los ultranacionalistas que lo apoyarán hoy

29 may 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Ratko Mladic, ex jefe militar de los serbios de Bosnia detenido esta semana y acusado de crímenes de guerra, pidió ayer «calma» y dijo no querer ser causa de disturbios horas antes de que se celebre hoy en Belgrado una manifestación ultranacionalista en su apoyo convocada por el Partido Radical Serbio. «Está llamando a la gente a la calma, no debe correr la sangre, él no quiere ser motivo de disturbios», declaró el abogado del antiguo militar, quien añadió que este es «consciente de que será enviado» al Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia.

Las autoridades serbias se comprometieron ayer a investigar y aclarar las ayudas que recibió Mladic para escapar a la Justicia internacional durante casi 16 años. Según el fiscal serbio para los crímenes de guerra, «al esconder a Mladic causaron un daño considerable a Serbia. Esconder a fugitivos del tribunal de La Haya constituye un crimen grave».

Esta postura se vio reforzada por el presidente serbio, Boris Tadic, quien en una entrevista en la BBC prometió que las complicidades que permitieron escapar a Mladic serán esclarecidas. «Ampliaremos la investigación para saber cómo creó una red de protección a su alrededor y si están implicados en su protección ex miembros de las Fuerzas Armadas o de la policía».

Entre 1995 y el 2000, y antes de entrar en la clandestinidad después de la caída de Milosevic, Mladic vivió en Serbia a la vista y a sabiendas de todos, frecuentando incluso bares y asistiendo a partidos de fútbol en Belgrado. Su arresto, con una Serbia sometida a crecientes presiones de Bruselas ante sus pretensiones de integración europea, planteó numerosos interrogantes sobre la actitud de las autoridades serbias.

El diario Blic informó de que el detalle que permitió a los investigadores identificar formalmente a Mladic, cuando salía de la casa en Lazarevo, fue un anillo con una piedra preciosa en su mano izquierda. No obstante, informa Efe, el hallazgo se produjo después de un exhaustivo seguimiento de los movimientos y comunicaciones de los familiares.

Según el diario Danas, fuentes de la investigación indicaron que durante un año los familiares fueron puestos bajo vigilancia especial. «Os felicito muchachos. Habéis encontrado a quien estabais buscando», habrían sido las primeras palabras de Mladic, informa por su lado el rotativo Politika. Esta reacción habría causado cierta sorpresa a los agentes que ese día registraron por primera vez la aldea del Lazarevo.

Según Politika, los policías preveían una detención más difícil, ya que esperaban que Mladic iba a negar su identidad, fugarse con sus ayudantes o encerrarse en su refugio. Los agentes, añade, habían elaborado planes para impedir una resistencia armada o un suicidio del ex general, acusado de ser el responsable de miles de muertos durante la guerra de Bosnia.

Mladic está encarcelado en Belgrado. Los jueces dieron luz verde a su extradición, pero su abogado informó de que apelará. Si lo hace, los jueces disponen de tres días como máximo para decidir si es trasladado a La Haya o no.