El presidente iraní señala que el proceso electoral está bloqueado

La Voz AGENCIAS | TEHERÁN

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Los comicios serán aplazados, al negarse los conservadores a aceptar a los candidatos La crisis queda aplazada porque Jatamí tuvo que ser ingresado por un dolor en la espalda

31 ene 2004 . Actualizado a las 06:00 h.

Los conservadores iraníes llevaron ayer el proceso electoral a un punto muerto al negarse a aceptar a un número de candidatos suficiente. Y todo a falta de tres semanas para la celebración de unas elecciones legislativas que probablemente deberán aplazarse, según declaró ayer el presidente del Gobierno, Mohamed Jatami. El líder reformista subrayó que ante las múltiples amenazas de dimisiones y las numerosas peticiones a favor de un retraso de los comicios, previstos inicialmente para el 20 de febrero, la única posibilidad de salir de este bloqueo es presionar a los conservadores, que no están dispuestos a ceder. El Gobierno de Mohamed Jatami, que tenía previsto celebrar una sesión de emergencia para estudiar qué pasos tomar, tuvo que cancelarla después de que Jatami fuera hospitalizado por un dolor de espalda que le tendrá varios días alejado de la actividad política. A pesar de las presiones, los organismos controlados por los conservadores aceptaron finalmente 1.160 candidaturas, una tercera parte de la censuradas inicialmente por las comisiones de control electoral, que provocaron una grave crisis política al rechazar 3.604 candidaturas, en su mayoría reformistas, de las 7.900 presentadas. Antes de ser ingresado, Jatami dijo que «ningún candidato debe ser destruido; no: debe ser libre», al igual que aseguró que «el Gobierno debe estar en manos del pueblo, y no enfrentado a él». Fiel a su estilo conciliatorio, Jatami no quiso ir más lejos ni amenazó con boicotear los comicios, pero sí lo hizo su ministro del Interior, Abdelvahid Musavi Leri. Ausencia de competición «Dada la ausencia de competición en la mitad de los colegios...las elecciones del 20 serán ilegales», dijo Leri, quien fue más lejos y, a preguntas de si su ministerio pensaba organizar los comicios, respondió: «Eso, por supuesto, está descartado». «El gobierno tiene el derecho de anular las elecciones si entiende que van contra el interés nacional», explicó.