El gran año del Celta B acaba en Elda (2-0)

x.r.c. VIGO

GRADA DE RÍO

RC CELTA

Dos goles del Eldense en la segunda mitad decantaron la eliminatoria por el ascenso a Segunda

11 jun 2023 . Actualizado a las 21:30 h.

El Celta B acabó su excelente temporada en Elda. Los de Claudio Giráldez, que no pudieron hacer su fútbol el último día de competición, aguantaron durante el primer tiempo, pero en el segundo, el Eldense, que supo jugar su partido y que construyó todo su juego por su costado derecho, empató la eliminatoria con un taconazo de Soberón y sentenció el duelo con un cabezazo de Nieto. Los levantinos pasan a la final por el ascenso por un global de 4-3, un revés que en absoluto empaña la sobresaliente temporada del segundo conjunto vigués.

El Celta B aguantó la primera mitad, sufriendo en el inicio y en el final del acto ante un Eldense que salió enchufado y con afán intimidador ante un filial que no tuvo el balón y se afanó en defender con corrección, aunque lo pasó francamente mal con las apariciones por la banda izquierda de Abad y Nieto. A los dos minutos, los alicantinos ya habían disparado a puerta en un par de ocasiones y Christian Joel, que recuperó la titularidad en la portería tras su paso por el primer equipo, ya tuvo que realizar la primera intervención.

Pese a no estar cómodo, el Celta B tuvo paciencia, fue anestesiando el partido y avisó por primera vez con un tiro casi sin ángulo de Lautaro, aunque la ocasión más clara llegó a los 37 minutos, cuando Miguel Rodríguez lanzó una contra que posibilitó a Iker Losada plantarse ante el portero rival en la divisoria del área grande. El de Catoira le picó el balón, que salió por encima del larguero.

El Eldense replicó con un tiro al palo de Cristian Montes después de ganar una vez más su batalla por la banda izquierda. El zurdazo fue el toque de corneta para una sucesión de córneres, centros laterales y disparos desde la frontal que convirtieron en asedio la recta final del primer acto. El filial, que se defendió con orden, salió indemne.

Pero el segundo tiempo fue otra historia y el muro del Celta B terminó cayendo. La primera grieta, como no podía ser de otra manera, llegó por la derecha del ataque local, con Abad ganándole la espalda a la defensa para meter un balón en el corazón del área que Soberón convirtió en gol con un sutil taconazo.

El 1-0 llevó al Eldense a dar un paso atrás, pero sin perder de vista el marco rival y apenas diez minutos después, llegó el segundo. En un falta lejana con prolongación y cabezazo de Nieto al fondo de las mallas.

Faltaban 20 minutos y apenas se jugó un minuto más. Los eldenses comenzaron a tirarse al suelo, a perder tiempo y a llevar el otro fútbol a su máxima expresión sin que el Celta B fuese capaz de hilvanar cuatro pases seguidos. En esa recta final, Medrano fue el único que llegó a disparar, aunque su intento no cogió portería.

El curso se acabó para el Celta B con alguna lágrima en los ojos, empezando por las del capitán, pero con un temporadón colectivo para recordar.