Regreso al punto de partida

Xosé Ramón Castro
X. R. Castro VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

El Calderón fue el primer escaparate del Celta actual en el cruce de Copa en el que jugaron siete canteranos

21 dic 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

El Celta actual mostró su tarjeta de presentación en la Copa del Rey de la temporada 2009/10. En Villarreal y sobre todo en el Calderón, en donde un equipo vigués plagado de canteranos, hasta seis en el once inicial, no solo empató ante el Atlético de Madrid sino que mereció el triunfo. Los colchoneros acabaron colgados del larguero, y luego aprovecharon el indulto para clasificarse con un gol de Forlán en Balaídos.

Aquel Celta de Eusebio formó con Yoel, Vasco, Túñez, Noguerol, Lago, Michu, Vila, Abalo, Botelho, Trashorras y Iago Aspas. Álex López, Joselu y Bustos fueron los cambios. Seis canteranos en el once de los que solo dos saltarán hoy de inicio al rectángulo de juego. Iago Aspas fue uno de los grandes protagonistas del partido al dar un soberbio taconazo que posibilitó el tanto de Trashorras en el inicio de partido. Túñez es el otro.

También saltará al campo esta noche Álex López, que en aquel entonces, al igual que Iago y Túñez, hacía sus pinitos en el primer equipo.

Aquella fría noche del mes de enero del 2010 en Madrid supuso para muchos el descubrimiento de un equipo que venía en camino, que sufría en la Liga pero que se venía arriba con el foco de la Copa del Rey. Muchos de aquellos protagonistas, incluso canteranos, ya no están, pero el germen de Eusebio desarrollado por Herrera ha prendido desde entonces y no ha dejado de crecer. Dos años más tarde ha sido capaz de volver a Primera, en donde no ha perdido un ápice del descaro de aquella noche histórica, aunque como en aquella ocasión necesita más pegada arriba. Convertir en gol todo su fútbol.

Iago Aspas y Michu tuvieron claras ocasiones para batir a David de Gea, pero los celestes hicieron agua y al final tan solo se llevaron un empate.

Ese 1-1 se une a la buena racha de resultados de los últimos tiempos del Celta en territorio colchonero. Allí han ganado los vigueses en cuatro de las cinco últimas visitas en Liga. En la dos últimas por 2-3 y 0-3. Un dato para la esperanza.