La número dos del partido en Galicia asegura que nadie de la cúpula del partido tuvo nunca ningún encuentro con ninguna víctima
14 dic 2025 . Actualizado a las 18:05 h.La secretaria de Organización del PSdeG y viceportavoz del grupo parlamentario, Lara Méndez, ha defendido esta mañana en Santiago el modo de proceder de su partido en el caso Tomé, argumentando que se «actou en horas».
La número dos de los socialistas gallegos, que participó este domingo en la protesta contra el proyecto de Altri, respondía así a algunas voces de su partido, como la de Carmela Silva, que aseguraban que la dirección había actuado mal. Méndez ha defendido que procedieron estrictamente tal y como establecen los protocolos y ha insistido en el compromiso de su partido con la causa feminista, el único que tiene abierto un canal anónimo de denuncias.
En línea con la versión ofrecida por Besteiro este pasado viernes, Lara Méndez explicó que, a través de una tercera persona, accedieron al testimonio de una víctima y recordó que la animaron a denunciar, porque ellos no podían hacerlo en nombre de nadie, tal y como establece la ley.
La número dos de los socialistas gallegos reiteró que nadie de la dirección tuvo nunca ningún encuentro con ninguna víctima. «Actuamos como debíamos cos instrumentos que tiñamos», ha defendido Méndez.
El «Me Too» en Ferraz que degrada la esencia feminista del partido
El alcalde de Almusafes desobedece a la ministra Morant al seguir en el Consistorio pese a dos denuncias por acoso sexual y laboral
María Salgado
«La reflexión profunda que debe hacer el PSOE no es en términos electorales, sino en términos éticos». Esta es la exigencia de la portavoz socialista en la Comisión de Igualdad del Congreso, Andrea Fernández, que comparten muchas compañeras de filas en una formación defensora de los derechos de las mujeres, una esencia que no quieren ver degradada tras el torrente de denuncias por acoso sexual contra seis de sus dirigentes. «El PSOE es un partido feminista por excelencia y no son bienvenidos los comportamientos machistas: los rechazamos, nos asquean, los combatimos y los combatiremos siempre, dentro de nuestra casa y fuera», sostuvo ayer la presidenta de la Cámara Baja y secretaria general de los socialistas de Baleares, Francina Armengol, quien pidió a los militantes que «no se dejen tumbar» por este inesperado Me Too en Ferraz. No solo está en juego el voto femenino.
Terremoto político en el PSPV
La crisis interna abierta por el goteo incesante de presuntos casos de acoso sexual se agravó este sábado, cuando el último de los denunciados, Toni González, alcalde de Almusafes (Valencia) y número dos en la ejecutiva provincial de Carlos Fernández Bielsa, se enrocó en su cargo, desobedeciendo así a la secretaria general del PSPV y titular de Ciencia, Diana Morant. El regidor anunció que no dejará su acta y que se llevará a sus siete ediles al Grupo Mixto de este Ayuntamiento «para seguir trabajando desde la Alcaldía por los vecinos y vecinas». La ministra le había exigido que abandonara todos sus cargos «orgánicos e institucionales», pero González informó en un comunicado oficial publicado en redes sociales que solo dejará las responsabilidades en el partido tras solicitar la suspensión de militancia.
La formación empezó a investigarlo el viernes por dos denuncias por acoso sexual y laboral, publicadas por El Diario y confirmadas por fuentes socialistas, que fueron presentadas en el canal interno anticoso del partido y ante el departamento de cumplimiento de la normativa. «Tendrá que probarlo, tendrá que probar que no ha sido consentido», advirtió el alcalde, que negó los hechos denunciados, que se habrían producido en este Consistorio.
El PSPV solicitó a la dirección federal la constitución de una gestora en la agrupación municipal de esta localidad. «El mensaje es muy claro: contundencia y rapidez, tolerancia cero contra el acoso. Animamos a cualquier mujer que se haya sentido en esta situación a denunciar para que el partido pueda actuar», dijo Morant.
La crisis ha desbordado todos los cauces salpicando a los socios de la coalición. Después de que la vicepresidenta segunda y fundadora de Sumar, Yolanda Díaz, exigiese el viernes una remodelación profunda del Ejecutivo, la ministra de Defensa, Margarita Robles, le pidió que se deje de «lamentaciones» y se centre en «trabajar mucho» en su ministerio. «No queremos corruptos ni machistas; el que lo haya hecho, que lo pague».