Vigo es la ciudad con mejor salud financiera de Galicia, y Ourense se convierte en la peor

GALICIA

El Observatorio Municipal Gallego refleja la incapacidad de la capital ourensana para gastar sus ingresos debido a la prolongada falta de presupuestos actualizados.
18 oct 2024 . Actualizado a las 13:51 h.La capacidad de aprobar o prorrogar los presupuestos municipales marcan la diferencia en las cuentas municipales de las ciudades gallegas. Vigo y Ourense presentan ambos extremos, según el último informe del Observatorio Municipal Gallego de la Red Localis, que sitúan a la primera como la que goza de mayor salud financiera de Galicia, mientras que la capital ourensana evidencia dificultades por la inestabilidad política sufrida durante los últimos años. El estudio mide la solvencia a partir de cinco parámetros: capacidad de financiación, remanente de tesorería, pagos pendientes a proveedores, ratio de deuda sobre ingresos corrientes y ratio de remanente sobre ingresos corrientes.
El informe destaca que tanto Santiago como Vigo no han tenido que acudir a la prórroga presupuestaria desde el 2011 (Pontevedra solo lo hizo en 2023), lo que posibilita una «mejor gestión». En el caso de Vigo, la estabilidad del Gobierno local, con el socialista Abel Caballero siendo alcalde desde hace 17 años y los últimos nueve con mayoría absoluta, ha permitido sacar adelante las cuentas municipales cada ejercicio. Esa situación ha contribuido a manejar con mayor eficiencia la balanza de ingresos y gastos, de forma que el ratio de deuda es del 0,1 % sobre sus ingresos corrientes, mientras que en el 2011 ascendía al 21 %. Además, la ciudad cuenta con un remanente de tesorería positivo de 491,6 euros per cápita, lo que le permite cubrir sus compromisos financieros y acometer inversiones sin depender de la deuda.
Por el contrario, Ourense es el municipio que enfrenta las mayores dificultades financieras. Desde el 2014, la ciudad ha prorrogado sus presupuestos cada año salvo en el 2020. Esta situación ha generado un remanente de tesorería elevado, con 1.168 euros per cápita, pero no ha podido ser utilizado de manera efectiva debido a esa ausencia de un presupuesto actualizado. El informe advierte que esta acumulación de recursos no implica una buena gestión, sino todo lo contrario: la falta de capacidad para gastarlos en beneficio de la ciudadanía. Además, Ourense presenta una de las mayores necesidades de financiación per cápita, con -47,2 euros, lo que refleja un déficit en sus cuentas. En el 2017, su capacidad de financiación (la diferencia entre ingresos y gastos no corrientes) ascendía a 310 euros.
En este ámbito, Santiago lidera con 78,3 euros por vecino, mostrando una alta habilidad para financiar gastos con recursos ordinarios. Le siguen Vigo (74,3 euros), Pontevedra (56,7) y A Coruña (53,1). En el caso de esta última, sus cuentas presentaban una mejor situación hace siete años, con 75,2 euros por persona. En Ferrol, esa capacidad es muy limitada con apenas 11 euros por persona. El remanente de tesorería, que refleja la facultad de los municipios para cubrir sus deudas al final del ejercicio, también sitúa a A Coruña con problemas de liquidez, al ser negativo en 21,4 euros per cápita. Es la única urbe gallega que muestra ese déficit; mientras que en Vigo asciende a 491,6 euros.
Santiago y Pontevedra encabezan la lista de los ayuntamientos con mayores pagos pendientes a proveedores, con 117,4 y 88,7 euros por habitante, respectivamente. En el otro extremo, Lugo y Vigo presentan las cifras más bajas, con 16,8 y 25,4 euros. En cuanto a la deuda sobre ingresos corrientes, Vigo ha logrado prácticamente eliminar su deuda, ratio que se ha reducido también en A Coruña en trece puntos, aunque se sitúa todavía en el 22 %, lo que la convierte en la ciudad más endeudada. El remanente sobre ingresos corrientes de Ourense alcanza el 118 %, un porcentaje muy elevado debido la incapacidad de la ciudad para gastar sus ingresos por la prolongada falta de presupuestos actualizados.