Lisardo Capote, de Vigilancia Aduanera, va más allá al mirar hacia el futuro: «Los juicios están tardando en salir entre cuatro y cinco años, y eso que se aumentó de tres a cinco magistrados. Pero esa no es la solución: faltan funcionarios, secretarios judiciales y magistrados. Otra cuestión fundamental implica, pero ya en Madrid, replantearse las demarcaciones judiciales, que son decimonónicas. Se habla de hacer una ciudad de la Justicia, pero ahí siguen, hablando, sin concretar y, mientras tanto, en los juzgados, los funcionarios, ya sean jueces, secretarios, fiscales o de otro rango, con el agua al cuello», denuncia.
Mejor causas pequeñas
Otro condicionante del aparato judicial en el Campo de Gibraltar son las instalaciones, que no permiten el pase a disposición judicial de un gran número de detenidos. «Si hay más de 20 arrestos, que aquí tampoco es atípico, también supone un contratiempo. Los juzgados no tienen espacio físico para dar cabida a semejante cantidad de imputados. Pero es que tampoco hay funcionarios para unos pases tan numerosos», explican desde la Guardia Civil. La carencia ha sido plasmada en numerosas ocasiones en forma de protesta o de demanda por representantes judiciales, pero sigue sin respuesta en forma de más medios.