Galicia tendrá una nueva unidad para coordinar la investigación sobre incendios forestales

Paula Méndez / R. S.

GALICIA

Un miembro de la UME durante la extinción de un incendio forestal en Galicia
Un miembro de la UME durante la extinción de un incendio forestal en Galicia UMEGob

Sus labores estarán desvinculadas de las tareas de extinción y se centrarán exclusivamente en el estudio de los fuegos

09 ago 2021 . Actualizado a las 19:05 h.

Galicia contará con una Unidad de Investigación de Incendios Forestales (UIFO), una nueva unidad de élite creada por la Xunta que coordinará la labor investigadora sobre los fuegos en el terreno en la comunidad autónoma junta a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Así lo ha anunciado hoy el conselleiro de Medio Rural, José González, antes de reunirse en el Pazo de Quián (Boqueixón) con el director xeral de Defensa do Monte, Manuel Rodríguez, integrantes de esta unidad especial de investigación y representantes del Ejército.

La UIFO estará formada por 15 miembros de la escala de agentes ambientales, con dependencia directa del director de Defensa del Monte y desvinculados de las tareas de extinción, por lo que podrán centrarse específicamente en la investigación de los fuegos. También, gracias a esa dedicación en exclusiva, la UIFO podrá «focalizar o seu labor naquelas zonas do territorio máis afectadas en períodos de alto risco ou en situación de alta actividade incendiaria», ha remarcado el conselleiro, lo que además ofrece la posibilidad de diseñar e impartir una formación especializada en materia de investigación sobre incendios forestales.

José González ha puesto en valor «a coordinación e colaboración desta unidade coas Forzas e Corpos de seguridade do Estado, tanto coa Policía Autonómica e Nacional como coa Garda Civil e mesmo co Exército», y ha advertido a los incendiarios que «temos moitos ollos enriba deles», refiriéndose al hecho de que las cámaras de vigilancia abarcan ya el 70% del territorio gallego.

Se espera que la puesta en marcha de esta unidad traerá consigo consecuencias positivas en el estudio y seguimiento de las parroquias que registren una alta actividad incendiaria, el incremento del número de detenciones de presuntos incendiarios o la mejora en el conocimiento de las causas y motivaciones de los fuegos.