Vicente Celeiro, exfutbolista: «Non me gusta facerme maior»

GALICIA

Celeiro trabaja desde hace más de veinte años como comercial de productos médicos
Celeiro trabaja desde hace más de veinte años como comercial de productos médicos XOAN CARLOS GIL

Héroe del deportivismo por el gol que salvó al equipo coruñés de bajar a Segunda B en 1988, vive desde hace años cerca del estadio vigués de Balaídos, donde jugó como celeste dos temporadas

07 nov 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

A Vicente Celeiro (Vilalba, 1962) le encantaría que alguno de sus dos hijos siguiese sus pasos. ¿Querría verlos de corto jugando en un estadio? No. Lo que le gustaría a este exfutbolista es que alguno de ellos continuase su labor como asesor de ventas de material médico, la profesión a la que se dedica desde que se retiró de las canchas de juego en los años noventa. «Caín nisto de casualidade. De xogador paraba nunha cafetería onde cadraba con xente doutras profesións. Cando me retirei resultou que precisaban comerciais para isto e aí empecei», explica.

Vicente Celeiro jugando con el Celta en 1991
Vicente Celeiro jugando con el Celta en 1991 Benito

A día de hoy, es difícil encontrar a un exdeportista tan encantado con su reconversión profesional. «É un traballo que require ser extravertido, ter unha boa relación co cliente, prepararse ben para as preguntas que che fan os médicos... Coma no fútbol, tes que estar sempre listo e que non te collan durmido. Aquí non tes un partido o domingo, pero todos os días pasas a proba do bo servizo. A min encántame e gustaríame que algún dos fillos collese o negocio», cuenta.

 

Vicente Celeiro junto a Djalminha en el Memorial Moncho Rivera
Vicente Celeiro junto a Djalminha en el Memorial Moncho Rivera CESAR QUIAN

Su trabajo le tiene cada día en la carretera, recorriendo Galicia. Aunque le queda poco tiempo libre, practica pádel dos o tres veces a la semana y aún se apunta a alguna pachanga -«O fútbol once xa me esixe moito, pero ao fútbol sete ou ao indoor aínda me animo», aclara- porque el balompié sigue siendo su pasión: «Vexo todo o fútbol que podo, é o meu único vicio».

Para él, que siempre ha asegurado tener el corazón repartido entre Deportivo y Celta, esta no está siendo la mejor temporada. Los resultados no acompañan a ninguno de sus dos equipos, aunque Celeiro prefiere tirar de optimismo y pensar que las cosas se irán enderezando. ¿Hará falta otro gol milagro como el que él marcó en mayo de 1988 para evitar el descenso del Dépor a Segunda B? «Oxalá non! Cunha vez basta, xa foi bastante traumático daquela», afirma.

Vicente Celeiro celebra con la afición el gol ante el Rácing de Santander que evitó el descenso del Dépor a Segunda B
Vicente Celeiro celebra con la afición el gol ante el Rácing de Santander que evitó el descenso del Dépor a Segunda B Xosé Castro

El exfutbolista formula ese deseo desde Vigo, donde se quedó a vivir tras su etapa como jugador celtiña. Reside en una zona próxima al estadio de Balaídos, junto a su mujer y su hijo menor (deportivista, por cierto). Su hijo mayor (celtista, para que no falte el morbo) vive en A Coruña y hace un año le convirtió en abuelo de una niña. «Non tiña eu moita gana de ser avó, facíame maior, e a min o de facer anos non me gusta», confiesa. Pero en doce meses la pequeña se ha convertido en «o xoguete» de la familia. Aún no le han regalado su primera equipación deportiva, pero Celeiro augura que le caerán las dos porque padre y tío rivalizan en colores futbolísticos. Quizás sea ella quien acabe por seguir los pasos de su abuelo sobre el césped: «Por que non? Queriamos un netiño para seguir dándolle ao balón, pero, por que non vai ser ela a que xogue por exemplo no Dépor feminino?».

Fui

El delantero vilalbés en un encuentro con el Dépor en 1988
El delantero vilalbés en un encuentro con el Dépor en 1988 Xosé Castro

Futbolista profesional, jugué como delantero en el Deportivo y en el Celta

Soy

SANDRA ALONSO

Comercial de material médico y abuelo desde hace un año