Desahucian a la mujer que logró cambiar las condiciones de la risga

María Jesús Fuente Decimavilla
maría jesús fuente VIGO / LA VOZ

GALICIA

GUSTAVO RIVAS

Debe 1.350 euros del alquiler del piso de los meses en los que le retiraron la renta

08 nov 2018 . Actualizado a las 09:53 h.

El drama de la vecina de Vigo María T. parece no acabar nunca. Cuando ya había logrado sin pretenderlo que la Xunta cambiase la normativa de la risga para poder compatibilizarla con un trabajo, ahora le llega un aviso de embargo. Los ingresos no le llegan para pagar la deuda de 1.350 euros por el alquiler del piso correspondientes a tres meses, y el propietario se ha cansado de esperar. El juicio se celebrará a finales de este mes y el lanzamiento está previsto para el 18 de diciembre.

La mujer, que tiene a cargo dos hijos, recibe una risga de la Xunta de 597 euros al mes y paga 450 de alquiler. Ahora ha conseguido un cheque social del Concello de Vigo que supone 270 euros para ayuda al alquiler, 58 para alimentación y otros tantos para luz y agua. En los tres casos son pagos únicos, lo que supone un total de 386 euros para todo el año. Tampoco con esto le da para saldar la deuda contraída durante los meses que dejó de percibir la risga. Entonces se produjo un malentendido porque no dio a conocer a tiempo a la Xunta los 140 euros que empezó a ingresar por el trabajo de dos de sus hijos. Fue a raíz de quedarse sin la renta y denunciar su situación en este diario cuando la valedora do pobo, Milagros Otero, decidió intervenir de oficio. Gracias a esto, la Consellería de Política Social decidió cambiar la normativa para permitir que la risga sea compatible con los ingresos por un trabajo siempre que sean inferiores a los de la renta social. En ese caso se aporta la diferencia. Aclarada la situación, y una vez que los dos hijos que ingresaban los 140 euros se fueron de casa, María T. volvió a cobrar la risga, que pasó de 650,78 euros, cuando eran siete en la familia, a 597,30. Por el error se vio obligada a devolver 200.

Con los ingresos que consigue al mes no ha sido capaz de ahorrar lo que le debe al propietario de la vivienda. Aunque en su día este le advirtió que la había denunciado y le llegaría un burofax, no pensó que ese momento estaría tan próximo. Emprendió una ofensiva de envíos de currículos para trabajar en lo que fuera: limpieza, hostelería, cuidado de niños, de mayores... Ofrecía disponibilidad horaria. La fortuna no estuvo de su parte y los empleos que le surgieron no compensaban. «Me salió un trabajo para toda la semana, de lunes a domingo, de 8.00 a 14.00 horas y de 16.00 a 20.00. Tenía que limpiar la vivienda y cuidar a un señor, pero me ofrecían 750 euros, en principio sin asegurar. Después dijeron que me aseguraban dos horas, les pedí 850 y asegurada y me dijeron que no», explicaba la afectada a La Voz.

Desde que recibió el aviso de embargo, va de una oficina de servicios sociales a otra en busca de solución. Le dicen que busque otro piso y que después solicite la ayuda, pero nadie le quiere alquilar sin una nómina.

La falta de pisos sociales en alquiler en Vigo complica aún más las cosas, lo que ha obligado a la Xunta a reubicar a algunas personas en otros municipios.

La renta se podrá cobrar si el salario que se perciba no supera los 440 euros

Era una de las peticiones más demandadas y se pondrá en marcha el próximo año: la Consellería de Política Social contempla que las personas que perciban un salario que no supere la media de la risga, de 440 euros, puedan mantener la renta. La idea es completar los ingresos que perciba el solicitante hasta llegar a esa cifra. Otra de las novedades es la posibilidad de que pueda percibir la risga más de una persona en el mismo hogar. Se han dado casos como el de una mujer de Vigo que cobraba la renta y compartía piso con otra que trabajaba sin existir ninguna vinculación entre ambas, simplemente con el ánimo de repartir gastos, y tuvo que irse a vivir sola pagando más de piso para que no se la retiraran.

XOAN CARLOS GIL

La oficina de Embargos de Vigo da a la madre con tres hijos un mes para que se vaya del piso

El Servicio Común de Notificaciones y Embargos de Vigo dio ayer un mes de plazo a la inquilina con tres hijos para que abandone el piso de la calle Aragón que ahora es propiedad de Divarian (una gestora inmobiliaria de BBVA y Cerberus, un fondo de inversión de Nueva York).

La inquilina y los tres menores podrán estar un mes más en la casa mientras buscan una alternativa de alojamiento. Una vez pasado ese plazo, ya en diciembre, la oficina buscará una nueva fecha, en función de sus disponibilidades, para desalojar a la familia y cambiar la cerradura. No descartan que el lanzamiento se vuelva a suspender.