El autor del crimen de O Porriño dejó un sobre con 1.800 euros para sus hijos

a. martínez / m. torres VIGO / LA VOZ

GALICIA

Marcos Canosa

Tomás Romero mató a su mujer y a continuación escribió una carta en la que pedía disculpas a la familia

20 jun 2018 . Actualizado a las 20:33 h.

Tomás Romero mató primero a su mujer en el garaje y después escribió la nota con la que quiso pedir perdón a sus hijos y que se localizó en la habitación de la pareja. Después bajó de nuevo al garaje y volvió a disparar la escopeta, pero para acabar con su propia vida. Esta es la línea que sigue la investigación para establecer la secuencia de la tragedia que ha conmocionado al municipio de O Porriño. Magdalena tenía tres impactos por arma de fuego, uno en la espalda, otro en la nuca y otro en la cabeza, mientras que él se mató junto a ella con un solo disparo en el pecho.

La nota que escribió era casi ilegible, mezclando minúsculas y mayúsculas, con un pulso tembloroso y líneas que evidenciaban la situación de tensión en la que su autor la escribió. En la misiva pide perdón a sus hijos y dice que acaba también con su vida con un texto similar, a falta de que se confirme caligráficamente, «porque sin vuestra madre no tiene sentido».

Esta circunstancia permite establecer la cronología de la tragedia, que comenzó a fraguarse cuando Tomás pidió permiso en su trabajo. Solo había acudido a devolver unas llaves y le dijo al jefe que tenía que salir para firmar los papeles del divorcio.

En la carta le dejaba indicado a sus hijos, de 24 y 27 años, el lugar en el que había un sobre con 1.800 euros para que ellos pudieran localizarlo en el bajo de la vivienda, ubicada en el barrio de Filgueiras, en la entidad local de Chenlo. Dejó el dinero para hacer frente a unos gastos inmediatos a los que se había comprometido con sus hijos. 

Declaraciones de testigos

Los investigadores de la Guardia Civil continuaron ayer tomando declaración a personas del entorno del matrimonio. El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia confirmó el lunes que no existían denuncias previas por malos tratos, pero los investigadores querían indagar si en algún momento el hombre pudo haber proferido amenazas delante de testigos. De hecho, había expresado a algunos vecinos la profunda decepción que sentía tras la separación e incluso llegó a mencionar que podría ser capaz de cometer alguna locura.

La investigación del crimen la dirige el juzgado de Tui, ya que los casos de violencia machista se asignan siempre a los juzgados en los que residen las víctimas. Y Magdalena había firmado un contrato de alquiler en Tui, donde estaba viviendo desde hacía dos semanas.

Los cadáveres de Tomás y de Magdalena ya se encuentran en el tanatorio de Guillarei, en el municipio de Tui. Ambos recibirán sepultura a las seis de esta tarde en el cementerio parroquial de Soutelo, de donde era oriunda la víctima.

Personas del entorno de la pareja recordaron ayer que Magdalena tenía 18 años cuando se casaron y que ahora, tras separarse y vivir en otro lugar, él intentaba siempre verla. De hecho, antes del crimen la llamó en alguna ocasión para que ella acudiera al domicilio para llevarle determinados medicamentos, ya que él era diabético. Fuentes cercanas al caso aseguran que el hombre estaba obsesionado con ella.

Las llamadas al 016 son gratuitas y no quedan registradas en la factura.

O Porriño guarda un minuto de silencio «por una mujer que quiso cambiar su vida»

Alrededor de un centenar de vecinos de O Porriño se concentraron ayer en la plaza del Ayuntamiento y guardaron un minuto de silencio para expresar su repulsa por el asesinato de una vecina a manos de su marido, porque había decidido «cambiar su vida», informa Efe. Así lo manifestó la alcaldesa, Eva García de la Torre, quien recalcó que la víctima, de 47 años, «había decidido libremente cambiar su vida» al cesar la convivencia con su marido hacía unas semanas. Incidió en que cuando una mujer toma sus decisiones «está ejerciendo su derecho y este «no tiene que ser un acto de heroicidad, sino de libertad». «No se nos puede exigir que seamos siempre valientes para ejercer nuestros derechos, porque nos cuesta la vida», sentenció. 

Repulsa en el Parlamento

El Parlamento también mostró su repulsa por el crimen. La sesión plenaria comenzó con un minuto de silencio en memoria de Magdalena. El presidente, Miguel Santalices, trasladó su condolencia a toda la familia. También en el Senado se guardó ayer un minuto de silencio por las mujeres que han sido asesinadas por sus parejas en lo que va del 2018.

La presidenta de la Diputación de Pontevedra trasladó ayer «a conmoción de todo o goberno provincial» ante el último caso de violencia machista. Carmela Silva expresó «a nosa solidariedade e agarimo para os fillos e familiares de Magdalena, da vítima». No se olvidó de otros dos casos ocurridos en las últimas horas en Granada y Badalona. «Falamos de tres mulleres asasinadas en dous días. Isto é insoportable», dijo la presidenta provincial.

La Marcha Mundial das Mulleres ha convocado para esta tarde concentraciones en las principales ciudades gallegas.