El hermano del líder de Xuventudes Socialistas de Galicia es secretario general de Novas Xeracións en Ourense
29 ene 2018 . Actualizado a las 19:00 h.«O noso pai preferiría que falásemos de fútbol, pero nada; a nós gústanos a política. Á hora de comer, somos nós os que pedimos cambiar Los Simpson para ver os informativos». Lo dice Nabor González Fariñas, pero podría decirlo también su hermano gemelo Adrián. Ambos coinciden en muchas cosas. Físicamente son casi idénticos, hablan y se mueven como si fueran copias exactas, pero también tienen su diferencias. Una de ellas es especialmente llamativa. Uno es dirigente del colectivo juvenil del PSOE y otro, del PP. Nabor es, desde el pasado mes de noviembre, el secretario general de las Xuventudes Socialistas de Galicia y Adrián ocupa desde julio el mismo cargo, aunque a nivel local, en la capital ourensana.
Según cuentan, son los típicos hermanos que se quieren mucho pero que siempre están discutiendo. Esa rivalidad la llevaron también a la política, aunque aseguran que esta actividad les ha ayudado a comunicarse más y mejor. Cada uno ha tenido un recorrido particular en las organizaciones juveniles a las que pertenecen, pero ambos se afiliaron casi a la vez, justo después de cumplir los 18 años. Lo hicieron, según dicen, por convencimiento propio, puesto que ni sus padres ni nadie de su familia pertenece a ningún partido político.
En su caso, además de militar, han asumido responsabilidades de dirección en sus respectivas organizaciones. El primero fue Adrián como secretario general de Novas Xeracións en Ourense, pero Nabor acaba de adelantarle (en este caso, por la izquierda) al ser elegido como máximo responsable de Xuventudes Socialistas en Galicia. «Botámonos moitas pullas o un ao outro. Cando saían enquisas que lle daban mal resultado ao PSOE eu metíame con el e agora el fai o mesmo comigo, pero non teño envexa ningunha do cargo que ten, vendo o traballo que dá e o tempo que quita», afirma Adrián.
En las autonómicas «formouse unha boa» cuando les confundieron en una mesa electoral Como es lógico, el hecho de que dos hermanos gemelos casi idénticos tengan una militancia política tan dispar es motivo de muchas anécdotas. La más llamativa se dio con motivo de las últimas elecciones autonómicas. Un militante del PP vio en una mesa electoral a Nabor con una identificación de apoderado del PSOE y pensó que se trataba de Adrián. Inmediatamente llamó a la sede popular para comunicar la supuesta traición y «formouse unha boa», relata el ahora secretario xeral de Novas Xeracións en Ourense. El informante conocía «so de vista» a Adrián y no sabía que este tenía un hermano gemelo, y mucho menos todavía que milita en las Xuventudes Socialistas.
Tirando de argumentario para comentar la posibilidad de una gran coalición
Como ellos se entienden tan bien y la actualidad política internacional ha vuelto a poner de moda la «gran coalición» a la alemana, les preguntamos a ambos si PP y PSOE deberían tener una relación más estrecha, una cuestión que de vez en cuando sobrevuela la política nacional. Pero sobre este particular cada uno de estos dos hermanos recurre al argumentario de su respectivo partido. Nabor, el socialista, dice que con las políticas del PP el entendimiento es «moi complicado» y Adrián, el popular, expone que en «materias de Estado» sí debe haber acuerdos entre ambas formaciones. De ahí a una gran coalición, aún queda una notable distancia.
Cargos públicos
En cuanto a su futuro personal, ninguno de los dos se ve ocupando cargos públicos. «O que quero é formarme como economista e despois dedicarme profesionalmente a elo», explica Adrián, que estudia Economía en Santiago. En similares términos se expresa su hermano Nabor, que también es universitario en la capital gallega, aunque él prefirió Ciencias Políticas (otra diferencia más entre ambos).
Desde que Nabor fue elegido como líder de las Xuventudes Socialistas de Galicia, en el campus las anécdotas y confusiones que provocan estos dos hermanos de veinte años son cada vez más frecuentes. Quizás dentro de algún tiempo, si ambos perseveran en política, las anécodtas aún serán mayores.