El verbo poder también se conjuga en gallego

Susana Luaña Louzao
susana luaña SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

XOAN A. SOLER

La asamblea debería decidir el pulso de fuerzas que se echa desde que hace un año tuvo que irse Riobóo

11 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Desde que hace tres años un grupo de amigos de la Complutense hizo suyo el Yes, we can de Obama para bautizar como Podemos la vertiente política del 15M, la familia léxica del verbo poder se hizo trending topic. Y se les llenó la boca con la palabra empoderamiento, ese manido vocablo con el que ellos defendían que el poder como sustantivo, por primera vez en la democracia, emanaba por fin del pueblo. Pero desde entonces han pasado más cosas que tiempo, y la batalla por el poder de abajo arriba se convirtió en una guerra horizontal personificada en las figuras de Iglesias y Errejón, con sus seguidores y sus detractores conjugando el verbo en gallego.

En Podemos Galicia el mes de febrero importa. En febrero del 2015, Breogán Riobóo fue nombrado primer secretario xeral de la formación morada en la comunidad; en febrero del 2016 se tuvo que ir por cuestionar la decisión de Iglesias de pactar con En Marea; y ahora, en febrero del 2017, Vistalegre debería cerrar el pulso que las fuerzas de Podemos se echan en Galicia y que mantiene a su secretaria xeral, Carmen Santos, en un difícil equilibrio entre quienes piden su dimisión por estar con En Marea, quienes la piden por lo contrario y quienes la piden porque sí.

El congreso debatirá la relación de Podemos con otras fuerzas políticas, sobre todo las nacionalistas, y en ese sentido, Galicia es una experiencia piloto que obligará a poner sobre la mesa los pros y los contras de esa alianza.

Y como poderoso caballero es don dinero, también se hablará de cuartos y de los diputados díscolos que quieren pagar a En Marea, pero no a Podemos. Que también de sueldos va la cosa. Lo dijo Monedero.