Feijoo: «Necesito un mapa y una cantimplora para entender lo de las mareas»

Juan María Capeáns Garrido
juan capeáns SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Admite un alto riesgo de quedarse «a las puertas» de la mayoría a pesar de no saber aún quién es su alternativa

14 ago 2016 . Actualizado a las 09:28 h.

O el PP o lío. Feijoo y los suyos ya lo decían con el bipartito del PSOE y el BNG y ahora intensifican su mensaje ante la irrupción de las mareas, Podemos y Ciudadanos.

-Antes le preguntaba por los problemas de Galicia. Ahora me gustaría conocer los de Feijoo.

-Pues sí, tengo un gran problema: no soy capaz de saber quién encabeza mi alternativa, solo sé que me voy a enfrentar contra un lío político, y por eso intento explicar que el objetivo no es solo ganar unas elecciones, sino buscar un punto de encuentro en Galicia y un proyecto en común para muchos gallegos que no piensan como un militante tradicional del PP. Quiero que sea un proyecto intergeneracional y atraer a los jóvenes que no entienden la deriva de un lío político como nunca ha habido en Galicia. Por eso ofrecemos responsabilidad, estabilidad y unidad.

-No cita a Ciudadanos, que puede hacerle un roto en Galicia por un puñado de votos, según la encuesta de Sondaxe.

-Recuerdo las encuestas de su periódico previas a las elecciones del 2009, del 2012 y la de ahora, y en todas teníamos un porcentaje de voto similar, pero los escaños se movían entre el 37 y el 39 (la mayoría son 38). El problema es que ahora se divide entre cinco, y entonces se dividía entre tres. Yo estoy animado, pero es cierto que hay un riesgo de que nos quedemos a las puertas, de que Ciudadanos obtenga unos votos estériles y que facilite un gobierno de las mareas y Podemos.

-En España ha cambiado el reparto de la tarta electoral. En Galicia parece que no, que hay un héroe o villano, que es usted, y luego están los demás.

-Yo no elijo cómo se organiza la oposición. Desde luego que preferiría tener una oposición más ordenada para poder hablar, para sentarnos, pero no sé muy bien cuál es mi alternativa, mi rival. Solo sé que en la oposición tienen más problemas entre ellos que contra el PP, y lo digo objetivamente. Veo una cierta situación de emergencia en el BNG y una gran improvisación en Ciudadanos. Llevo tres secretarios generales del PSOE en esta legislatura, y en estos momentos, los dirige una gestora. Yo pregunto, ¿cuál es la alternativa? Mi recomendación a los gallegos es que no nos metamos en un lío, con absoluta honestidad.

-¿Qué le parece la resolución del culebrón de las mareas y Podemos?

-Quien tiene siempre la última palabra es Pablo Iglesias, sus procesos son solo de adorno. Iglesias hace y deshace a su antojo. Ya lo vimos vetando a Beiras, vetando el grupo del Congreso, y lo hemos visto ahora...

-¿Qué le parece Luís Villares, el candidato «de consenso»?

-No lo conozco, pero las referencias que tengo es que se ha movido en el ámbito del nacionalismo. Y creo que con él quisieron acabar con el proyecto político de Beiras.

-¿Cree que es su epílogo, y si es así, es merecido?

-Bueno, eso de mandar un tuit un sábado de agosto diciendo que me voy y no hacer declaraciones... y después quejarse amargamente de la deslealtad de su colega, la señora Yolanda Díaz, y ver que las mareas, Esquerda Unida y Podemos no le quieren de candidato... tiene que ser duro.

-Eso es de primero de mareas, ¿si le hago un examen, lo aprueba?

-Lo admito, necesito mapa y una cantimplora para entender lo de las mareas.

-Si ese escaño que puede decidir una mayoría se cae por la corrupción del PP, ¿le parecería injusto?

-La corrupción en Galicia ha tenido más que ver con algunos gobiernos municipales. En la Xunta he mantenido un Gobierno al margen de sospechas, y cuando las hubo se apartaron de forma inmediata. Honestamente, no creo que sea un problema identificable con la Xunta.

-¿Será la última vez que se presente en Galicia?

-Me ha costado presentarme la tercera como para pensar en una cuarta.

-Entonces es de suponer que en las listas estará su delfín.

-Algo hemos aprendido con Fraga, aquello sí fueron unas primarias y no las de las mareas. Hubo urnas y colas para votar, no un dedo que eligiera al candidato.

-¿Gane o pierda, cuántos años tendrá al acabar el mandato?

-Si acabo... (piensa y sonríe) tendré 59 años recién cumplidos, ¡por debajo de los 60!

-Al final lo de la política no va a ser de paso. ¿Ha valido la pena?

-¿Esta Galicia es mejor que la del 2009? Sí. Entonces ha valido la pena. Y creo que hasta el 2020 se pueden hacer cosas importantes.

«Quien tiene siempre la última palabra es Iglesias. Sus procesos son solo de adorno»

«No tengo ninguna prueba de que Galicia arda más en los años electorales»

Es un clásico del verano incendiario en las redes sociales: la fotografía en el 2006 de un Núñez Feijoo, todavía aspirante a presidir la Xunta, con una manguera en la mano.

-Nada ha cambiado en cuanto al uso político del fuego.

-Sobre los incendios, en estos momentos lo que tengo que decir es que me siento orgulloso de cómo funciona el operativo.

-Un operativo siempre cuestionado, en verano e invierno.

-Le contestaré con datos. Entre el martes y el jueves de esta semana tuvimos 193 fuegos. Si el viernes me dicen que el operativo ha extinguido 170, que 18 están controlados y que cinco tienen puntos aislados activos, quiere decir que funciona. Es uno de los mejores operativos de Europa y estoy orgulloso de ellos, es lo mínimo que se le puede reconocer a la gente que está trabajando.

-Algunos días da la sensación de que en esa lucha los malos le ganan a los buenos.

-Según su periódico hemos tenido el julio más seco de los últimos cien años y no llueve desde San Xoán. Desde enero ardieron 8.000 hectáreas, y de estas 6.000 en estos tres días, con mucho viento. Sin viento el operativo es muy eficaz.

-El uso del fuego en el terreno político es una constante, ¿es sostenible la teoría de los incendios con fines políticos?

-Eso no lo puedo confirmar. En Galicia hay más personas detenidas por este delito que en toda España. Llevamos 40 este año, y la fiscalía dice que más del 80 % de los arrestados sufren trastornos psiquiátricos, además de los casos de negligencias.

-Se lo decía por las tramas y ese runrún de que Galicia arde más en los años electorales.

-No tengo ninguna prueba de ello, y si la tuviera la diría.