El tiempo seco y el calor de las dos últimas semanas de octubre han impedido que despeguen las ventas de la ropa de abrigo y de calefacciones
01 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.Ayer terminó un octubre que lleva camino de convertirse en uno de los más cálidos y menos lluviosos de los últimos años. Las temperaturas de más de 25 grados invitaron a seguir yendo a la playa, a pasear en manga corta y a sentarse en una terraza. Sin embargo, en los escaparates de las tiendas, los maniquíes lucen abrigos invernales, bufandas y botas de agua.
Que haya hecho un otoño tan seco y cálido está teniendo consecuencias muy negativas para el sector del comercio gallego, que no ha podido dar salida todavía a los artículos de la temporada otoño-invierno ni a electrodomésticos que otros años a estas alturas estaban muy solicitados, como deshumidificadores y calefacciones.
«Nosotros somos como los agricultores», deja claro Cristóbal García Nores, presidente del centro comercial abierto A Magdalena, de Ferrol, y añade: «Necesitamos que en cada estación venga el tiempo que corresponde». Si no es así, como ha ocurrido este mes de octubre, en el que se han alcanzado incluso los 30 grados en el sur de Galicia, «nos encontramos con abrigos en los escaparates mientras la gente va de sandalias», destaca Nores.
Las propias dinámicas del comercio les impiden reaccionar ante estos cambios inesperados de tiempo. «Los pedidos los hacemos con seis meses de antelación, no podemos vender otra ropa ahora que no sea la de otoño-invierno», explica Encarna Álvarez, la presidenta de la asociación de comerciantes de Vigo, que advierte: «Este octubre ha hecho verdaderos estragos en el sector».
Esperanzas en noviembre
Los comerciantes tienen claro que las ventas de octubre ya no las pueden recuperar y ponen sus esperanzas en que aumente la demanda con el cambio de tiempo: «Ya estábamos deseosos de que lloviese», dice Antonio Amor, al frente de la asociación de comerciantes Zona Obelisco, de A Coruña, «porque lo que no vendes hoy no lo vas a vender mañana».
Desde el sector afirman que solo tienen por delante mes y medio para tratar de recuperar las ventas perdidas en lo que va de otoño. «Con la liberalización de los períodos de rebajas, muchos comercios ya sacan saldos antes de Navidad, así que para esta campaña tenemos noviembre y principios de diciembre», afirma el presidente de A Magdalena.
Lo que sí han hecho los comerciantes es intentar adecuar los escaparates lo más posible al buen tiempo: «Los abrigos de piel los tenemos todos guardados, aún así la ropa que muestras no deja de ser de otoño, y ahora mismo ves a la gente pasear en manga corta y con sandalias», señala Cristóbal García Nores. Sin embargo, elgunos productos como los complementos sí se están vendiendo más que otros años, dice Antonio Amor.
Los comercios y grandes cadenas de venta de electrodomésticos también han notado un bajón importante en la demanda de deshumidificadores y calefacciones. «Hubo años que ya empezamos a vender deshumidificadores a finales de agosto, pero este año como apenas ha llovido y no hay humedad, la demanda ha sido bajísima», señalan desde Star Center de Lugo.
El comercio se ha visto perjudicado con este otoño seco y cálido, pero la hostelería, sin embargo, ha podido estirar la temporada de terrazas gracias a las altas temperaturas.