Juárez avisa al Parlamento que no debe aspirar a controlar al Estado

D. Sampedro / M. Cheda SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Los partidos censuran el desaire del delegado del Gobierno a la Cámara

19 mar 2014 . Actualizado a las 13:11 h.

Hasta el momento, Samuel Juárez, delegado del Gobierno en Galicia, se había limitado a explicar por carta las razones que le llevaron a desaconsejar que varios cargos de la Administración del Estado rechazaran la invitación cursada por el Parlamento gallego para comparecer ante la comisión de estudio sobre seguridad vial. Pero ayer se expresó verbalmente. Poniendo por delante su «respecto» a la Cámara autonómica, Juárez dijo que «hai que entender» que cada Administración tiene «o seu ámbito competencial», advirtiendo, además, de que el Parlamento gallego «non se pode convertir nunha toma de control das institucións estatais», argumentación que puso en su contra a todas las fuerzas políticas con presencia en O Hórreo.

Porque si algo hizo ayer Juárez fue reiterar su convicción de que, como dijo por escrito, «no se considera apropiada» la comparecencia de funcionarios y cargos de la Administración periférica del Estado ante el Parlamento gallego. Es más, en declaraciones recogidas por Rocío Pita, de la Redacción de La Voz en Ferrol, Juárez remarcó que, por definición, un Parlamento es un «órgano de control do Goberno», labor que, sin embargo, circunscribe únicamente a las instituciones autonómicas.

Dicho eso, Samuel Juárez mostró su disposición «a colaborar» con la comisión de seguridad vial en todo lo que requiera, aunque matizando que «de aí á comparecencia hai unha diferencia», dijo, pues entiende que no se puede producir «unha acción de control hacia departamentos e ministerios que non corresponde ao Parlamento de Galicia», sino a las Cortes.

Pero las explicaciones del delegado del Gobierno no convencieron en O Hórreo, donde todos los grupos, desde el Mixto hasta el PP, coincidieron como poco en lamentarlas. Si Carmen Iglesias, única representante del grupo Mixto, entiende que Juárez «ten a obriga de dar explicación e comparecer» cuando así se solicite, el portavoz del BNG, Francisco Jorquera, elevó un poco más el tono al valorar que con su rechazo a la invitación parlamentaria lo que hace el delegado del Gobierno «é unha demostración do seu desprezo ao autogoberno galego». En la misma línea, la viceportavoz de AGE, Yolanda Díaz, cree que Juárez «mesmo chega a afastarse do principio de legalidade que rixe para todos nós» al desoír varias peticiones de comparecencia.

Desde el PSdeG, su portavoz, José Luis Méndez Romeu, introdujo un matiz al señalar que el listado de comparecencias de la comisión de seguridad vial fue decidida por el PP «e se non comparece é porque están dacordo en que non compareza». Se trata de una cuestión que «ten que resolver o Goberno galego», arguyó Méndez, y si no se zanja el asunto «é porque non queren».

Más contenido se mostró Pedro Puy, portavoz del PP. Le recordó a Juárez que las comparecencias eran para una comisión de estudio, desprovista de la capacidad de control, y que se limita a «reclamar a opinión de expertos». «Lamentamos que non veñan», señaló Puy, tras matizar que dicha negativa no obedece a ninguna conspiración.

Reconsiderar la petición

Y tampoco parecieron convencer las explicaciones de Juárez al vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, quien defendió la «conveniencia» de que el delegado del Gobierno ceda y permita acudir a la comisión de seguridad vial a los tres cargos estatales citados. «É unha comisión que pretende escoitalos para facer propostas de mellora», adujo el número dos del Ejecutivo gallego.

«Sería unha boa decisión que atenderan ese requerimento do Parlamento, sempre respectando a capacidade de cada Administración para decidir o que crea máis convinte», abundó Rueda, antes de participar en un acto institucional en Santiago. A su juicio, las peticiones de comparecencia formuladas inicialmente por la presidenta del Parlamento, Pilar Rojo, eran «razoadas» y su «insistencia» de las últimas horas, «tamén».

El número dos de Feijoo explicitó el desacuerdo del Gobierno gallego con la negativa de Juárez, antiguo compañero suyo en el de Consello de la Xunta. No obstante, consultado al respecto, eludió exigirle públicamente una rectificación formal. «Ao delegado do Goberno -zanjó la cuestión- é a quen lle corresponde avaliar cal é a súa decisión».