Dos profesoras ratifican que Basterra llevó a Asunta «drogada» a clase

Xurxo Melchor
xurxo melchor SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

<span lang= es-es >Tres nuevos testigos</span>. En la imagen de la izquierda, las dos profesoras de música que ayer ratificaron que Basterra llevó un día a la niña «drogada» a clase. Antes llegó al juzgado la mujer del vecino de la pista de Teo que pasó junto a su marido tres veces por el camino y que no vio el cadáver.
Tres nuevos testigos. En la imagen de la izquierda, las dos profesoras de música que ayer ratificaron que Basterra llevó un día a la niña «drogada» a clase. Antes llegó al juzgado la mujer del vecino de la pista de Teo que pasó junto a su marido tres veces por el camino y que no vio el cadáver. xoán a. soler< / span>

La acusación particular cree que los padres de la niña están «cada vez más cercados». SIGUE AQUÍ TODA LA INFORMACIÓN DEL CASO

15 ene 2014 . Actualizado a las 12:28 h.

«Cada vez más cercados» y con más indicios en su contra. Así considera la asociación Clara Campoamor que están los padres de Asunta, Rosario Porto y Alfonso Basterra. La entidad ejerce la acusación particular en el caso y ayer aseguró que tras el paso por los juzgados de una gran cantidad de testigos cada vez está más claro que «la investigación de la Guardia Civil es absolutamente brillante», aunque evitaron valorar «por prudencia» si cada vez está o no más claro que la niña fue asesinada por sus padres, imputados y en prisión preventiva desde hace más de tres meses.

Entre esos testigos cuyos testimonios considera la acusación particular que cada vez «cercan» más a los padres de Asunta están los de las dos profesoras de música que ayer declararon en los juzgados de Santiago. Ante el juez instructor, José Antonio Vázquez Taín, ratificaron lo que ya habían declarado días atrás ante la Guardia Civil. Es decir, que el 9 de julio Alfonso Basterra llevó a la pequeña al curso de verano de música en el que estaba matriculada y que la niña estaba «drogada, mareada y como sonámbula».

El abogado defensor de Rosario Porto, José Luis Gutiérrez Aranguren -que no hizo ninguna pregunta a las testigos-, admitió a la salida de los juzgados que las profesoras de música habían manifestado que vieron sedada a Asunta aquel día y que cuando Alfonso Basterra volvió para recogerla justificó el estado de la pequeña alegando que tenía alergia y había tomado medicación que le producía esa somnolencia.

Eso sí, Gutiérrez Aranguren quiso destacar que las maestras también habían manifestado que la relación de Asunta con Rosario Porto era «fantástica», por lo que, añadió, «todo aquello que se estaba especulando de una mala relación queda absolutamente descalificado». Las profesoras de música afirmaron, sin embargo, que en la relación de la pequeña con su padre, Alfonso Basterra, sí había comportamientos que no acababan de encajar.

El cadáver en la pista de Teo

Ayer también declaró como testigo la mujer del vecino del lugar de Teo en el que apareció el cadáver de la niña a la 1.15 horas del 22 de septiembre. Este hombre y su esposa pasaron tres veces por la pista en la que se halló el cuerpo entre las 23 horas del 21 de septiembre y las 00.30 de la madrugada siguiente.

Tanto el hombre, que ya prestó declaración en los juzgados, como ayer su mujer, ratificaron que no vieron el cuerpo de la niña cuando pasaron por el camino en el que posteriormente apareció. Para el abogado de Rosario Porto eso significa que el cadáver no estaba en esas horas y que, por lo tanto, no lo pudo depositar allí la madre de la pequeña ni su padre, que estuvieron localizados desde que a las 22.10 horas entraron en la comisaría para denunciar la desaparición de su hija. Para la acusación particular, al igual que para los investigadores, esto solo demuestra que estos testigos no vieron el cuerpo, no que no estuviese.