O Rei das Tartas se muda a la autovía

J. C. MONDOÑEDO / LA VOZ

GALICIA

Carlos Folgueira, ante el conocidísimo negocio que regenta a la orilla de la carretera.
Carlos Folgueira, ante el conocidísimo negocio que regenta a la orilla de la carretera. vítor mejuto< / span>

El popular repostero abrirá un área de servicio para contrarrestar el bajón

19 oct 2013 . Actualizado a las 11:17 h.

«Aquí ya le vimos las orejas al lobo hace algún tiempo y nos decidimos a actuar», admite Carlos Folgueira, el hijo del creador de O Rei das Tartas, uno de los negocios más conocidos de Galicia. Actualmente, la marca tiene establecimientos en varios puntos de Galicia y el resto de España, aunque probablemente el más popular es el que se encuentra al pie de la N-634 a pocos kilómetros de Mondoñedo en dirección a Ribadeo. Con aquel traslado el repostero quiso acercarse al tráfico cuando la ruta de la costa evitó a la ciudad que alguna vez fue capital de provincia. Ahora el tráfico lo vuelve a esquivar, pero Carlos ha tomado cartas en el asunto: «Es una doble oportunidad porque no hay prácticamente ningún área de servicio en todo el trayecto hasta Guitiriz». Así que O Rei das Tartas dará el salto a la autovía, probablemente la próxima primavera, coincidiendo, según sus cálculos, con la entrada en servicio de todos los tramos gallegos de la transcantábrica.

«De todos modos, vamos a mantener abierto este negocio -explica Folgueira-. Sin duda, se verá afectado por el descenso del tráfico, pero queda cerca de una de las salidas y pensamos que puede seguir funcionando». Pero Carlos, que no tiene el bigote de su padre, pero sí su sonrisa y su talante abierto, sabe que los autobuses ya no pararán en igual medida en la explanada que hay frente a su negocio y que el reclamo del bigotudo cocinero al pie de la carretera va a tener muchos menos conductores a los que seducir: «Todo lo que sea mejorar las comunicaciones es bueno. Eso no puede negarse. Yo creo que deberíamos esforzarnos por conseguir que viniera más gente a Mondoñedo, conseguir que la visita sea lo más atractiva posible». Por si acaso, en la misma explanada donde hoy todavía aparcan coches y autobuses, hay ya una maqueta de lo que será la última readaptación del negocio, convertido de tienda en el centro del pueblo a área de servicio al pie de la autovía del Cantábrico.