Ponen a la venta el chalé que Manuel Fraga poseía en Perbes

m. cheda SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Los herederos del fundador del PP piden 1,8 millones por su residencia

23 may 2013 . Actualizado a las 10:00 h.

A través de LN Asociados, una céntrica inmobiliaria coruñesa, los herederos de Manuel Fraga han puesto a la venta esta semana la casa que el expresidente de la Xunta, fallecido el 15 de enero del 2012, poseía en Perbes (Miño). Los actuales dueños de la propiedad, que consta de 900 metros cuadrados construidos más finca de 4.000 con vistas de lujo y acceso directo a la playa, piden 1,8 millones de euros a los potenciales compradores.

Se trata del inmueble contra el cual, dejándolo prácticamente destrozado, atentó el Exército Guerrilheiro el 27 de mayo de 1988, año y medio antes de lograr el león de Vilalba la primera de sus cuatro mayorías absolutas en Galicia. El mismo donde el viejo jefe del Ejecutivo solía veranear y bañarse frente a él de buena mañana. Ese en el que, aun encontrándose él de vacaciones, aprovechaba para despachar con sus conselleiros más cercanos. Allí empezó a cocinarse también, en el 2005, la transición Fraga-Feijoo. Y mucho tiempo antes, en agosto del 89, entre esas paredes el anfitrión, Cascos, Rato, Trillo y Lucas habían acordado elevar a Aznar, en detrimento de Isabel Tocino, a candidato popular a la Moncloa.

¿En qué estado se halla un lugar con tanta historia? «Está muy bien, aunque la última remodelación gorda data de cuando lo del atentado», explica un agente del sector conocedor de la oferta inmobiliaria. Dentro, espacio no falta, desde luego, pues se cuentan hasta siete dormitorios y seis servicios, al margen del par de estancias y otros tantos baños habilitados en un bloque anexo para invitados.

La Voz contactó ayer con dos de las hijas del fundador del PP para conocer las razones de la venta, si bien prefirieron dejar el asunto en el ámbito de lo privado. «Ni quiero hablar de eso», despachó el tema una de ellas.

Cuando el chalé cambie de manos, de Fraga solo quedarán en Perbes sus restos reposando en el cementerio parroquial.