Rueda aboga por las fusiones de ayuntamientos, pero de manera voluntaria, y por una urgente regulación en el ámbito de los sueldos municipales.
-Empezaron muy fuertes con Oza y Cesuras, pero luego ese globo de las fusiones se les pinchó. ¿No van a meter mano al mapa municipal de una vez?
-No estoy de acuerdo. Seguimos adelante con la fusión de Oza y Cesuras, y diciendo a todo el mundo que se anime a imitarla que tendrá el apoyo de la Xunta. Y, al que no se anime, que tendrá que unirse para otras cosas. Esta legislatura, y se va a ver claramente, todas las ayudas que demos a ayuntamientos van a estar cada vez más privilegiadas para los que presenten proyectos conjuntos. Espero que los partidos de la oposición se aclaren de una vez, digan qué quieren y estén de acuerdo.
-¿Pero qué Galicia quieren ustedes? ¿Una de 315 concellos?
-Si tiene que ser una de 315, queremos que sean 315 que actúen coordinadamente cuando puedan hacerlo, y dejen de prestar por separado servicios que, si ofreciesen conjuntamente, serían más baratos y eficaces.
-A todas estas cosas, la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) acaba de decirle a Rajoy que sí, que muy bien, pero que con calmita...
-El simple hecho de que se hable de estos temas es fundamental ya. Aunque soy consciente de que la gente espera que se den pasos, y con cierta rapidez. Hay que empezar a hacer cambios palpables con cierta urgencia.
-También con los sueldos de los alcaldes, ¿no? Cobra cada uno un poco a la buena de Dios...
-No es normal que, entre ayuntamientos con circunstancias parecidas, haya diferencias muy importantes de sueldo entre funcionarios ni, sobre todo, entre responsables políticos. Hay que dar cierta uniformidad a eso. Si no se hace a nivel estatal, nosotros lo haremos aquí.
-¿Y cuándo? Porque llevan hablando de eso desde ni se sabe.
-Usted citaba antes a la FEMP que, parece ser, adquirió ayer con el presidente [del Gobierno] el compromiso de hacerlo, pero sin dar fecha. Si esa fecha no es rápida, hay que hacerlo antes aquí. Para esto, sinceramente, no deberíamos esperar más.