Los nacionalistas ponen a Caballero contra las cuerdas
17 nov 2012 . Actualizado a las 07:00 h.El grupo del BNG en el Concello de Vigo puso ayer en evidencia al gobierno en minoría de Caballero</b> al negarle su apoyo para la aprobación del presupuesto de la Gerencia Municipal de Urbanismo del 2013. Sus tres votos junto a los once del PP sirvieron para dar al traste con las intenciones del alcalde y ponerlo contra las cuerdas.
Ante el temor a recibir una segunda derrota consecutiva, acto seguido Caballero desconvocó in situ el consejo del Instituto Municipal de Deportes en el que tenía previsto aprobar un recurso contra una sentencia que daba la razón a los trabajadores.
En el caso de la Gerencia, la escenificación del Bloque puede ser temporal, tal y como ocurrió el pasado año. De hecho, los motivos del rechazo a las cuentas de Urbanismo siguen siendo los mismos. Los nacionalistas prefieren esperar a conocer los presupuestos globales del Concello antes de dar el visto bueno a este tipo de organismos autónomos. En principio, aprecian los mismos problemas que el año pasado, por lo que no advierten ningún esfuerzo, ni decisión encaminados a resolverlos. Tienen claro que la Gerencia no funciona ni da respuesta a las necesidades urbanísticas de la ciudad. Buena muestra de ello es que las sesiones semanales del consejo apenas duran cinco minutos. Otro ejemplo más de la situación decadente de este organismo es que el 76 % de su presupuesto, de 6,9 millones, se destina a personal, una cifra muy alejada del 30 % que gasta el Concello en pagar a la plantilla.
Este hecho es lo que llevó ayer al grupo municipal del PP a pedir que la Gerencia se vuelva a integrar en la estructura del Ayuntamiento para ahorrar costes, máxime cuando los ingresos correspondientes a la actividad urbanística apenas suponen un 18 % del presupuesto.
El desplante del BNG a Caballero con la Gerencia de Urbanismo no es el único en los últimos tiempos. Con motivo de la subida de impuestos municipales para el próximo año en un 2,1 % le obligó a congelar el recibo del agua hasta que no se cobre por consumo real en lugar de hacerlo con un tope mínimo de 30 metros cúbicos cada dos meses. A esta condición se sumó la congelación del billete de transporte público, aunque en este caso se negociará al margen de las tasas.
El incremento de la inversión en empleo y servicios sociales en detrimento de las humanizaciones es una de las condiciones que el Bloque impone a Caballero para aprobar el presupuesto municipal del 2013.
La creación de empleo es precisamente uno de los caballos de batalla entre los nacionalistas y el PSOE. Mientras que para los primeros las obras de humanización no han generado puestos de trabajo, pese a la elevada inversión, para el gobierno municipal es «la mayor fuente de empleo», como les volvió a restregar ayer mismo el alcalde.
Tampoco está por la labor el BNG de que el Concello gaste en terrenos para la ciudad deportiva que pretende construir el Celta. Ayudar en la gestión lo que sea, pero de eso a invertir en el proyecto hay un trecho que no está dispuesto, ni mucho menos, a traspasar.