La solidaridad tiene premio

maría cedrón REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

El lucense Carlos Fernández hace tiempo que desgrava por donar.
El lucense Carlos Fernández hace tiempo que desgrava por donar. pradero< / span>

Las ayudas a oenegés y entidades caritativas, que se multiplicaron durante las Navidades, tienen desgravación

07 ene 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

La Navidad que ahora termina es especial. Desde diferentes oenegés y entidades caritativas explican que los donativos de particulares y empresas acostumbran a aumentar estos días. La solidaridad se multiplica y, además del premio que supone a los que dan aportar ese pequeño grano de arena para tratar de mejorar la vida de los que, por ejemplo, hacen cola estos días en el Banco de Alimentos de Lugo, desde Hacienda también dan el suyo. Pequeño, modesto, pero dan. Cualquier donativo otorgado a una entidad de interés público es susceptible de desgravación fiscal a la hora de hacer la declaración de la renta.

No importa la cantidad, ni tampoco cuándo se realice. Tampoco lo hace que sea un donativo en metálico o, al contrario, que se trate de un camión de alimentos o un piso. Y en base a qué entidad se dé, estas van desde el 35 al 10 %. «En el caso de alimentos, por ejemplo, puede hacerse un contravalor para su desgravación», explica el responsable de Gestha Jorge María Mollinedo.

Desde el primer euro

Hace tiempo que Carlos Fernández lo sabe. Hace ya tres décadas que colabora con AI, Amnistía Internacional, y formó parte del primer grupo que esta oenegé tuvo en Galicia. «Esta es una entidad de interés público y por eso las cuotas desgravan. Son unos 48 euros al año el donativo, y hay también cuotas para parados y estudiantes, que son de 24. En la época estudiantil no utilizaba esa ventaja, aunque ahora lo hago», dice. Y añade que «esto es un detalle que tiene el Gobierno y que muestra el interés que tiene en que haya solidaridad con estas entidades», dice. Al final la cantidad no es mucha, aunque es un detalle que agradece.

Además todas estas entidades dan un certificado para que a la hora de rendir cuentas a Hacienda esta no tenga dudas de la buena fe de los que colaboran con las oenegés. «Cada vez que alguien nos da un donativo le damos el documento oficial que puede presentar luego en la declaración de la renta. Luego están los que dan algo de forma anónima. En ese caso, claro, no van a desgravar», explica por ejemplo Miguel Pérez de Juan, el encargado de llevar las riendas de Cáritas de la zona Ourense.

«En el caso de los alimentos puede hacerse un contravalor para su desgravación»

Y cómo es la ley que rige esto. El abogado y asesor fiscal de Russell Bedford, César Morate, explica que es «la Ley 49/2002 (reglamento de desarrollo aprobado mediante Real Decreto 1270/2003) la que establece un régimen fiscal especial para las entidades sin fines lucrativos y las actividades de mecenazgo realizadas por particulares».

El objetivo, añade, ahora también es «estimular la participación de la iniciativa privada en la realización de actividades de interés general para toda la comunidad. Es decir, se trata de que las entidades beneficiarias no deban tributar, o lo hagan lo menos que puedan, y que quienes colaboran con los fines de estas organizaciones puedan obtener incentivos de naturaleza tributaria».

Entre las entidades que pueden acogerse a ese tipo de régimen fiscal están, fundamentalmente, las fundaciones, las asociaciones declaradas de utilidad pública, oenegés que sean fundaciones o asociaciones (aunque no hayan sido declaradas de utilidad pública), la Cruz Roja Española, la ONCE, y muchas más que hay en España.

La norma

Además, no es lo mismo que el donativo lo haga un particular o una empresa. Aunque para ir al detalle lo mejor es ir directamente a la norma. Pese a que la ley no es nueva, hay muchos benefactores que desconocen que pueden obtener ese pequeño favor. Y es que, aunque ayudar a los demás tenga premio fiscal, para la mayoría de los que lo hacen el mayor regalo es ayudar. Al menos es la idea.

«En el caso de los alimentos puede hacerse un contravalor para su desgravación»