Un jurado de la Audiencia de Valencia declaró culpable a un hombre, Francisco M., acusado de matar a un coruñés que fue apuñalado en un bar con un cuchillo en el transcurso de una fiesta de cumpleaños. El fallecido, Gabriel Sánchez-Tembleque Cano, era un estudiante de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Valencia que había hecho carrera como ilustrador de cierto prestigio en varios proyectos editoriales en Galicia, entre los que destacó su participación en el libro Juan Díaz Porlier, o resplandor da liberdade , en el que ilustró los textos redactados por Esteban Perelló Renedo para la edición del año 2003. Los miembros del tribunal popular, tras dos jornadas de deliberación, dictaron por unanimidad un veredicto en el que consideran probados los hechos incluidos en el escrito de acusación, que tuvieron lugar en la madrugada del 12 de mayo del 2007 en el pub Karapóker, en la avenida Manuel Candela de la ciudad de Valencia. Ahora será el juez el que imponga la pena de prisión al imputado por unos hechos que sacudieron la noche valenciana. Aquella madrugada de hace casi dos años, el acusado se encontraba en el local que regentaba con el dueño de este, Guillermo R., que a su vez estaba celebrando en el bar una fiesta de cumpleaños con unos amigos, entre los que se encontraba la víctima. Poco después de las cuatro de la mañana, Francisco M. se acercó a Gabriel con el cuchillo con el que habían cortado la tarta de aniversario y, haciendo ademán de clavárselo, preguntó a los presentes, que estaban jugando a los dardos, si lo mataba o no, a lo que estos respondieron que la broma no tenía gracia. «De manera inesperada» Gabriel, molesto por el incidente, decidió ausentarse del establecimiento y se fue hacia la única puerta que estaba abierta; cuando pasó cerca del acusado, este, «sin decir nada y de manera rápida e inesperada», según se recoge en el relato de los hechos aprobado por el jurado, se colocó ante él y le clavó el cuchillo con tal fuerza que le seccionó los vasos arteriales aorta y pulmonar. Gabriel Sánchez-Tembleque Cano sufrió una hemorragia masiva que le ocasionó la muerte minutos después de ser apuñalado, pese a recibir auxilio de las personas presentes en el bar y de un médico vecino de la zona que acudió al pub a socorrer al herido. Cuando la víctima, de 35 años de edad, cayó desplomada, el acusado tiró el cuchillo, salió del local y se quedó esperando en el exterior, donde fue detenido un poco más tarde por agentes de policía, que lo localizaron a los pocos minutos acompañado de una mujer en la parte de atrás del local de copas en el que se produjo el trágico suceso. De nada sirvieron entonces los intentos de los equipos médicos y policiales para reanimar al apuñalado, que perdió su vida sobre la acera.