Bartleby, igual de indolente en cómic

FUGAS

José Luis Munuera lleva al dibujo el ejemplo de resistencia pasiva que narró Herman Melville a mediados del siglo XIX. Ya saben: «Preferiría no hacerlo»

23 ago 2021 . Actualizado a las 10:39 h.

Siglo y medio después, el escribiente Bartleby sigue siendo uno de los mejores símbolos de eso que se ha dado en llamar la resistencia pasiva, ejemplificada en esta nada sofisticada, pero muy afortunada, frase: «Preferiría no hacerlo». La indolencia de este empleado en un bufete de Nueva York, narrada en tercera persona por Herman Melville, ha tenido versiones de todo tipo, aunque el cómic apenas le había hincado el diente. El murciano José Luis Munuera se ha atrevido con este célebre relato, publicado ahora en Astiberri, consciente de que un personaje como Bartleby obliga a exprimir el plano corto para exhibir su inmovilismo. Mirada perdida, hombros caídos, expresión neutra, elegancia improvisada... Munuera es un dibujante excepcional -El juego de la Luna, su primer gran trabajo, es una exhibición de talento con el lápiz- y ha sabido estar a la altura no solo para retratar tan complejo personaje, sino también para recrear los orígenes de Wall Street y del capitalismo. Porque al final, y eso es en síntesis lo que trataba de mostrar Melville, esta no es una historia de inanición, sino de aguante o, siguiendo la moda del siglo XXI, de resiliencia. Replicar los encargos siguiendo la misma estrategia, la del «preferiría no hacerlo» que llega a desesperar a sus compañeros de oficina, al abogado que la regenta y, obviamente, al propio lector. Es difícil empatizar con Bartleby, pero la historia, aunque muy breve, hace que a cada paso de página se empiece a entender un poco qué mueve a tan rocosa resistencia, a siquiera copiar un documento, qué lleva al protagonista a pasar su vida mirando una ventana que da a la nada, o qué impulso tiene para, al final, dejar pasar sus años así. Munuera hace que un texto con tan pocos elementos narrativos, contados personajes y diálogos breves, se convierta en una pieza atractiva en la que, además, pasear por una ciudad burbujeante a mediados del siglo XIX que se terminaría convirtiendo en la capital económica mundial, con sus muchas sombras. Quizá, las que ya advertía Bartleby el escribiente.

«Bartleby, el escribiente».

José Luis Munuera. Editorial Astiberri. 80 páginas. Color. 18 euros