Dicen que Shameless es la serie más gamberra de la historia de la televisión. Ese toque único se ha convertido en un enganche que la ha llevado hasta su octava temporada, en la que los Gallagher continuarán sobreviviendo, a pesar de todo, y que se estrena este lunes en Movistar Series. El alcohólico padre de familia Frank Gallagher (interpretado por William H. Macy, nominado a mejor actor de reparto por Fargo) seguirá sumido en los efectos de las drogas. Pero un buen día decidirá que tiene que contribuir de algún modo a la sociedad. ¿Será una de sus ideas de bombero o lo logrará realmente? Mientras tanto, Fiona, la hija mayor (Emmy Rossum, El fantasma de la ópera), seguirá haciendo su papel de madre de familia mientras decide invertir en un apartamento de alquiler. No será un mal negocio, pero otra persona sufrirá las consecuencias. En cuanto a Lip (Jeremy Allen White, Ley y orden), alcohólico como su padre, sus esfuerzos por dejar su adicción y reconducir su vida le llevarán a realizar sacrificios con los que no contaba. Y a Ian (Cameron Monaghan, Gotham) no le será fácil compatibilizar su enfermedad con su trabajo de paramédico, pero lo más importante será su vida personal, ya que se planteará dar un paso más en su relación con Trevor (Elliot Fletcher). Aunque suene paradójico, en la nueva tanda de episodios las risas están aseguradas.