Enrique Tenreiro convertirá en una escultura el árbol que se vino abajo en Méndez Núñez a principios de año
04 jul 2014 . Actualizado a las 23:20 h.Fue plantado en 1925 y se lo llevó por delante uno de los temporales que asolaron la ciudad a principios de este año. Se trata del conocido como Pino Pondal, un árbol erigido en los jardines de Méndez Núñez al lado de la estatua de Eduardo Pondal. Homenajeaba al poema Os pinos del autor, el mismo del que deriva el himno gallego. Derribado, su destino era el olvido. Hasta que el artista coruñés Enrique Tenreiro se cruzó en el camino.
«Lo vi tirado en la portada de La Voz [la del 15 de febrero] y pensé que era una barbaridad que esto se perdiera», recuerda el artista, que pretende transformar el árbol caído en una monumental escultural. «Creo que es una buena idea. Yo quiero regalársela a la ciudad, pero al margen de rollos políticos. Se la daré al ayuntamiento, mande quien mande, y me encantaría que la pusieran en el mismo lugar en el que estaba el árbol».
Aquel 15 de febrero, Tenreiro se desplazó a los jardines para ver el destrozo. «Estaba una chica de Cespa limpiando y me dijo que lo iban a llevar a Nostián y quemarlo. Y eso no podría ser. No podía ser que el símbolo de nuestro himno terminase de esa manera tan triste», indica. Por ello, el escultor se dirigió a las dependencias de Cultura. Allí lo remitieron a Medio Ambiente, en donde encontró una respuesta satisfactoria.
«Hice un escrito y me lo regalaron», dice. Para el desplazamiento fue necesaria una grúa y dos operarios, que llevaron la pieza a una casa que posee la familia de Tenreiro en O Vilar, en Nós: «Estuvimos una mañana. La pieza es enorme». Esta abarca las raíces y el tocón de dos metros.
Hasta ahora permanecía a la espera, secándose. En los próximos días Tenreiro usará la motosierra y la gubia para transformarlo en una obra de arte. Seguramente, también recurra a la pintura. «Todavía no sé lo que haré. Pero seguramente tenga alguna relación con Pondal», apunta. Además, con las partes sobrantes elaborará pequeñas piezas. «Es la madera más grande que he usado jamás y que vaya a usar en mi vida».