«Quien compra el cupón es la gente obrera, no la que tiene dinero»

FIRMAS

Su quiosco está ubicado en la avenida de Arteixo con la ronda de Outeiro

25 may 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Yolanda Suárez Castro (Lañas, Arteixo, 1960) empezó a vender cupones en el Cantón -donde luego se construyó la actual sede de la ONCE- en el año 1982. La calle Alfredo Vicenti fue su siguiente destino durante 25 años y después sus jefes la cambiaron a la plaza de Mina. Ahora vende -sobre todo Rascas- en el cruce de la avenida de Arteixo con la ronda de Outeiro. «Soy la vendedora de la ONCE más antigua de la ciudad, pero también la más abandonada». Y así nada más al empezar la charla.

-¿Porqué se siente abandonada? ¿Qué va mal? Aproveche, ande.

-Es que yo necesito que me cambien de quiosco.

-¿Qué pasa, en el centro se vende más?

-No, qué va. Yo ya estuve muchos años en el centro y allí no se vende nada. Uno piensa que al ser personas supuestamente con más poder adquisitivo, se vende más, pero no es así.

-¿Son menos aficionados a los juegos de azar?

-Quien compra el cupón es la gente obrera y la gente de barrio. La que tiene dinero, no. Puede ser que pase uno y te compre, pero es anecdótico.

-Eso en el Cantón y en la plaza de Mina. Pero... ¿en Alfredo Vicenti tampoco vendía?

-Ahí yo estaba muy contenta. Era gente que tenía dinero, pero otro tipo de clientela. Y tenía muy buena relación con los hosteleros de la calle. Aquello sí que lo echo de menos. Eran los tiempos en los que el Deportivo estaba en pleno auge con Arsenio y quedábamos en el Taboo. Lo pasábamos genial.

-¿Le pasaba algún jugador del Dépor a comprar?

-Sí, varios. Manuel Pablo, por ejemplo. Venía a la caja de ahorros que hay allí y paraba y me compraba. Me acuerdo también de Martín Vázquez, pero ya menos. Y de otro que estuviera en el Barcelona, que tenía un coche rojo... ¡Ah, sí! Ya me acuerdo: Julio Salinas.

-¿Algún otro cliente famoso, por cierto?

-El torero Javier Conde, que en esa época salía con la cantante Marta Sánchez, y también me vino a comprar.

-¿Mucho?

-Sí, diez cupones.

-¿Y Manuel Pablo?

-Dos, tres cupones. Manuel Pablo era cliente habitual. Martín Vázquez solo vino dos o tres veces.

-Volvamos a ese traslado que reivindica. ¿A dónde le gustaría ir?

-A otro barrio. Y eso que yo vivo aquí al lado, eh. Pero lo digo por las ventas.

-Por aquí no tiene tanto tirón.

-No se vende mucho, la verdad. Este quiosco estuvo cerrado durante bastante tiempo y, quieras que no, eso se nota.

-Para colmo tiene a otros dos quioscos en la misma manzana.

-También es eso. Aquí estamos tres vendedoras en la misma zona. Y dos de estos quioscos de la ONCE están prácticamente uno enfrente del otro.

Yolanda Suárez castro la primera vendedora de la once que hubo en la ciudad