Mosquera restaura el doble sentido en el puente de A Barca, pero mantiene restricciones de tráfico en las calles del entorno, poniendo a prueba la paciencia del PSOE
21 dic 2013 . Actualizado a las 22:17 h.Mosquera se ha dado prisa en reabrir al completo el puente de A Barca. Con doble sentido, sí. Pero con restricciones en las calles del entorno.
«Antes muerta que sencilla», cantaba aquella niña de Ayamonte hace unos años. Así piensa Césareo Xosé. Se restaura la doble circulación en el puente? pero impone una restricción de tráfico («solo servicios») en las calles del entorno, con la intencionalidad de rebajar (sí o sí) los aforos en A Barca.
El todopoderoso concejal de Infraestructuras ha tratado de evitar que cundiese la imagen pública de una derrota. Que diera la sensación de que lo hacía obligado por un mandato de la mayoría de la Corporación Municipal de Pontevedra. Pero ha mantenido una parte de sus decisiones, por una cuestión de principios irrenunciable para él.
Aprovechó que Acuaes anticipó el final de las obras en ambas orillas para escabullirse de una auténtica cuestión de confianza que iba a perder. Pero aún no está claro que vaya a safar por completo en el pleno municipal a celebrarse el próximo jueves.
El escenario previo era que se iba a materializar una pinza contra el BNG. Se aguardaba que PSOE y PP unirían sus votos para infringir una significativa derrota al grupo nacionalista. Para ser exactos, el Partido Popular aportaba sus 11 a los 3 de los socialistas para que prosperase una moción de Louro que exige la plena restitución del doble sentido de circulación. Pero ¡ojo! La moción veta asimismo cualquier restricción de tráfico en las calles adyacentes. Justo lo que Mosquera ha impuesto como un hecho consumado antes del pleno. Con señalización y agentes municipales en Alfonso XIII, Alameda y Echegaray.
Hasta ahora, la pinza PSOE-PP ha funcionado ya un par de veces en esta legislatura. Y el BNG se ha abanicado después. No creo que haya razones que fundamenten sospechar que los nacionalistas vayan a apearse de sus postulados.
Saúde pública
Cierre con sordina. El discurso oficial de la Xunta de Galicia de que «aquí no hay recortes» ha sido flagrantemente desmentido por sus propios actos. Como vimos esta semana en Pontevedra. El cierre del Laboratorio de Saúde Pública contradice semejante mensaje.
Viene a resultar que ahora es prescindible una instalación creada hace cuatro años con el marchamo de ser una instalación de singular interés. El mismo que justificó una inversión de 5 millones de euros que ahora se tiran literalmente a la basura.
Se suprime un centro de estudio, so pretexto de que se agrupará en Lugo, toda la capacidad investigadora bajo un supuesto principio de ahorro que resulta muy rebatible según el personal (21 trabajadores) del que se prescinde. Dicen que cerrar esta instalación de Campolongo apenas reportará un ahorro de 100.000 euros anuales.
Este tipo de cerrojazos, con sordina, resultan clamorosas evidencias de los tijeretazos que se estilan en determinados ámbitos de la Administración pública. Tristemente siempre se recorta hacia abajo. Aún no he visto una poda de altos y medios cargos
paga extra
Baltar sigue a Lores. Va a resultar que hasta Baltar viene a admitir -no ya de palabra, sino de obra- que el alcalde nacionalista de Pontevedra fue un adelantado. Y por tanto que Lores, «el insumiso», llevaba razón hace un año, cuando tantos en el PP le llamaron de todo menos bonito por gratificar a los funcionarios del Concello.
El presidente de la Diputación ourensana ha encargado a sus asesores que le estudien el posible abono de parte de la paga extra de la Navidad de 2012 que no se remuneró a la plantilla de ese organismo, según mandó el Gobierno de la Nación. Como ocurrió en tantos otros estamentos de las Administraciones públicas, salvo raras excepciones. Una de esas contadas salvedades fue la ciudad de Pontevedra. Aquí sí se abonó aquella extra, con el subterfugio de un complemento de productividad, contraviniendo al presidente Rajoy en su propia patria chica.
La situación un año después es hilarante: otras Administraciones (gobernadas por el PP) empiezan a retractarse de aquella decisión previniendo una oleada de sentencias en contra a raíz de denuncias promovidas por funcionarios a título particular. Y mientras Lores y su gabinete aguardan que los tribunales les den la razón por que en su día fueron denunciados por la Subdelegación de Gobierno al desobedecer lo que mandaba Moncloa.
cotobade
Lección de elegancia. Manuel Loureiro y Jorge Cubela acaban de protagonizar una escena, singularmente amable y elegante, que sobresale en el arisco y muchas veces zafio paisaje de la política provincial.
El primero, quien se autodefine como un viejo rockero que sin embargo no quiere emular a los incombustibles Rolling Stone, ha decidido que a los 61 va siendo hora de dejar paso. Fue alcalde de Cotobade durante 8 años; hasta ahora ocupaba la jefatura de la oposición frente al nuevo regidor, el joven Jorge Cubela, del PP, quien ganó el bastón en los comicios del año 2011 con una victoria electoral contundente por mayoría absoluta.
Ante el anuncio de la retirada de Loureiro, una vez escuchados los motivos, lo primero que ha hecho Cubela ha sido ponderar a su predecesor con palabras amables y respetuosas; encomiar su entrega política y personal por Cotobade, agradecerle su colaboración, espectacular cuando se trató del traspaso de poderes, y desear que quienes le sucedan, sepan mantener esas formas y talante. ¡Chapeau para ambos!