El autor ourensano afincado en Vigo presenta su undécima obra, «The End»
11 oct 2013 . Actualizado a las 12:35 h.Las letras es el mundo en el que se desenvuelve desde hace muchos años el escritor ourensano Juan Seoane, porque además de construir una sólida trayectoria como poeta, ha sido durante más de una década uno de los tres socios que comenzaron la aventura de llevar adelante la librería Versus. Ahora solo queda uno. La crisis le ha obligado a abandonar esta faceta como comerciante, pero a lo que no podrá renunciar nunca es a la creación literaria. De hecho, hoy presenta el poemario The End, que publica la editorial Adeshoras. Acompañan al texto varias ilustraciones del artista Fernando Ferro. Será a las 20 horas en Versus (Venezuela, 80).
-The End es su undécimo libro. ¿Qué supone esta obra respecto a su anterior trabajo?
-Mis trabajos anteriores quizás gozasen de un hermetismo más exento en esta obra, de cualquier manera, no creo que suponga una ruptura de estilo, porque la metáfora y las imágenes en la mayoría de los poemas continúa presentándose como un desvío contra lo que parece lógico más que contra el lenguaje.
-También estrena editorial. ¿Cómo ha sido este proceso de cambio?
-El cambio de editorial surge del perfecto entendimiento entre mis originales y la lectura atenta de su editora Susana Noeda y la afortunada colaboración de Fernando Ferro. De todo ello nace también un acercamiento al trato estético de la obra. Que una editorial nazca con la grandeza de preocuparse por la buena literatura y el buen diseño para mi supone un aliciente enorme.
-El título hace referencia obvia a una despedida, pero no será una despedida efectiva del campo de la creación, ¿no?
-The End para nada es una despedida de orden creativo, es simplemente la finalización de
un recreo y el paseo al borde de un fin que sin duda se regenerará.
-¿A qué estado de ánimo obedece?
-No vamos a obviar que en esta obra con todo su contenido híbrido, algunos poemas más «desnudos» que otros, conforman una unidad sustentada por esta época social que desgraciadamente a algunos nos ha tocado compartir. Este sería el estado de ánimo más aproximado a The End.
-Su poesía llega y se entiende. ¿Cree que hay muchos poetas que escriben de una forma opaca porque parece que se aprecia más que se entienda menos?
-No creo que algunos poetas se entiendan más o menos, se trata de buenos o malos poetas o buenos o malos lectores. En esta obra quizás menos menos, pero en la generalidad de mis anteriores escritos parto de un hermetismo más profundo, una hermenéutica que siempre deja la interpretación al lector para que forme la imagen y asuma el sentido. En algún caso la poesía moderna parece presentar aparentes roturas y no es así, el poema bien estructurado es una unidad fragmentaria que constituye una totalidad unitaria. Ahora mismo poner ejemplos de poetas de una corriente u otra no tendría sentido alguno. El ávido lector de poesía perfectamente lo entiende.