¿Qué pasaría si finalmente no hay acuerdo y la Brilat abandona su actual base? Fernando Pintos no se pone en esa situación, pero admite que sí se habló de tal posibilidad. En ese caso, Defensa exigiría una compensación a los comuneros por los bienes inmuebles y la urbanización de los terrenos. Pero la valoración de estos bienes, señalo el presidente de la comunidad de montes, es «disparatada. Non vou dar unha cifra, pero son moitos, moitos millóns». Un dinero, añadió, «que Defensa non chegaría a cobrar, porque a comunidade de montes non ten eses cartos e os montes, por lei son inembargables».
¿Y una expropiación de los terrenos para que la Brilat mantenga su base? Es una de las posibilidades, pero a nadie le interesaría porque, presumiblemente daría lugar a un nuevo conflicto judicial que tardaría en resolverse.
Son estas, entre otras, las razones que llevan a Fernando Pintos a afirmar que «estamos condenados a entendernos, hai que darlle tempo ao tempo».