Las reparaciones de telefonía en Manzaneda son de gran complejidad
19 feb 2013 . Actualizado a las 06:00 h.La central de supervisión detecta un problema y envía a un equipo a tratar de solucionar la avería. Y los operarios se desplazan al lugar en coche. Hasta ahí todo normal. Pero no siempre es así. A veces la nieve impide llegar en un vehículo hasta el lugar donde está, en este caso, la antena de telefonía averiada. Es el caso de la que Como la que en días pasados había dado problemas en Cabeza de Manzaneda.
Situada en la parte alta de la estación de esquí es la construcción a más metros sobre el nivel del mar, desde la que todo lo que no sea cielo se ve mirando hacia abajo. Así que a los operarios no les quedó otra que subirse al telesilla (en condiciones meteorológicas extremas, con el telesilla cerrado, se usa un vehículo especial, llamado oruga) para acceder. Hacen cola entre los que esperan para subir a esquiar, y después siguen subiendo, ya a pie, a la caseta.
La puerta está tapada por nieve hasta más arriba de las rodillas, así que para entrar toca «escalar». Otras veces directamente es necesario sacar una pala para cavar bajo el manto de polvo blanco en busca del acceso. Lo cuentan José Manuel Villanueva y Arturo Álvarez, dos de los 30 trabajadores en el departamento de operaciones que Telefónica tiene para la provincia de Ourense (a los que hay que sumar los operarios de otras cuatro empresas colaboradoras especializadas), expertos ya en esto de usar el telesilla para ir a trabajar. Porque la nieve acumulada en la antena o en la parábola suele dar problemas. No habían pasado ni quince días desde la última avería.