Urbanismo prorroga la suspensión de licencias en el centro histórico

Xosé Vázquez Gago
Xosé V. Gago A CORUÑA / LA VOZ

FIRMAS

La medida acompañará la tramitación del Pepri que arranca esta semana

09 dic 2012 . Actualizado a las 07:05 h.

La junta de gobierno aprobará esta semana de forma inicial el Plan Especial de Protección e Reforma Interior (Pepri) que afectará a la Ciudad Vieja, Atochas, Pescadería y Orzán. El concejal de Urbanismo, Martín Fernández Prado, ha confirmado además que se prorrogará la suspensión de licencias en esos barrios mientras se tramita el documento, que todavía debe pasar por un largo proceso administrativo antes de ir al pleno.

El visto bueno de la junta de gobierno supondrá el «inicio formal del expediente», explicó Fernández Prado. El documento deberá luego superar la exposición pública y ser informado por la Xunta. El concejal de Urbanismo reconoció que es «muy probable» que se produzcan cambios en el plan especial a raíz de esos trámites.

Fernández Prado también señaló que la suspensión de licencias podría ser revisada o modificada mientras se gestiona el documento, pero insistió en que la prioridad ahora es que la gente «vea el plan» y que su redacción definitiva sirva para «mejorar y conservar el centro histórico de la ciudad».

Desde el 10 de noviembre, cuando el alcalde Carlos Negreira anunció que el documento estaba listo, el gobierno ha explicado algunos detalles de la norma a asociaciones de vecinos y comerciantes de la zona.

De esas reuniones ha trascendido que será más flexible que la norma actual con los usos comerciales, de forma que se podrán dedicar a esos fines plantas más altas que la segunda, e incluso, en algunos casos y bajo «cautelas técnicas y de conservación del patrimonio», podría admitirse la unión interna de edificios para crear espacios comerciales más grandes.

Fernández Prado también explicó esta semana en la inauguración del tramo reurbanizado de San Andrés que el plan incluiría previsiones para reformar en una línea similar calles como Panaderas y las inmediaciones de la plaza de España.

Además está previsto que el texto incluya una serie de medidas para «controlar» el tráfico de vehículos en la Ciudad Vieja, según confirmó el alcalde el mismo día en que anunció que el plan estaba listo. Negreira subrayó que no se impondrá la «peatonalización» del barrio, aseguró que «ya nadie habla en esos términos ni en Pontevedra, ni en Toledo o Cuenca; se habla de zonas de acceso restringido (de vehículos) y de como coordinarlo con los habitantes».

No han trascendido más detalles de esas limitaciones al tráfico ni tampoco del resto de la normativa, aunque Negreira ha destacado que el Pepri se adaptará de forma «personalizada» a cada uno de los cuatro barrios en los que tendrá vigencia.

Ámbito de aplicación

En total, el plan cubrirá un área de 79,85 hectáreas en la que residen 13.466 vecinos, el 5,43 % de la población total de la ciudad. En esa zona hay 1.770 edificios. Algo más de la mitad, el 55 %, son anteriores al año 1960 y 1.170 tienen alguna clase de valor patrimonial. De ese conjunto, cerca de 290 sufren problemas de conservación.

El Ayuntamiento ha destacado que la zona Pepri sigue siendo el «centro comercial» de la ciudad e incluso «de la comarca». Según el documento, en esos cuatro barrios hay una media de 206 establecimientos comerciales por cada millar de habitantes, mientras que en el conjunto de la ciudad hay diez veces menos, 21,3 negocios por cada mil vecinos. Cerca del 76 % de los bajos comerciales de la zona están ocupados, aunque esa media varía mucho por zonas: baja al 55 % en la Ciudad Vieja y sube el 80 % en Pescadería.