Advierten de la elevada presencia de setas venenosas en el campus universitario

nacho mirás SANTIAGO / LA VOZ

FIRMAS

Álvaro Ballesteros

La amanita phalloides está relacionada con el noventa por ciento de las muertes producidas por setas

31 oct 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

No hace falta viajar muy lejos para encontrárselas. Abundan, por ejemplo, en el Campus Vida santiagués, donde hay que tener un cuidado especial si uno sale a buscar setas y no está demasiado familiarizado con los diferentes tipos. Hablamos de la amanita phalloides, una especie cuyo consumo puede provocar la muerte y que ha vuelto a ser noticia en Vigo, donde cinco personas han resultado intoxicadas.

El micólogo compostelano José María Costa dice que, días atrás, en la zona verde que rodea la Facultade de Farmacia había muchísimas. «Aproveitamos un roteiro ao Pedroso -explica- e fixemos alí a primeira parada no campus. Foi unha alegría atopar tantas, porque así puiden explicarlle á xente como son, é o primeiro tipo de seta velenosa que hai que coñecer».

Costa señala que la amanita phalloides es el típico hongo con sombrero y pie, en forma de paraguas, pero hay dos detalles que la caracterizan: la volva en la base y el velo himenial, una especie de anillo caído que se parece a una falda que rodeara su tallo. «A cor do sombreiro -dice el experto- pode ser verde oliva, pero segundo vai medrando clarea e, se chove, lávase e adquire unha cor máis amarela, hainas incluso brancas de todo».

Su pinta, por otro lado, es magnífica: carnosa, robusta, con un sabor dulce, un olor agradable que recuerda a la miel, a pétalos de flores secas... Precisamente por eso hay que tener todavía más cuidado, ya que el noventa por ciento de las muertes que se producen por comer setas tóxicas tiene que ver con el consumo de amanita phalloides. Así que si no se está completamente seguro o no nos acompaña un experto, lo mejor es no arriesgarse.