«Al musical aún no llegó la crisis»

Pablo Portabales
pablo portabales A CORUÑA / LA VOZ

FIRMAS

Gustavo Rivas

El coruñés Armando Pita ha ganado el premio Gran Vía al mejor actor de teatro musical

05 oct 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

Fue maestro de ceremonias en Cabaret, el papel que más le llenó. Raúl en El fantasma de la ópera, Lumier en La bella y la bestia y ahora interpreta a un viejecito en Forever young, la obra dirigida por Tricicle que estos días estuvo de gira por Galicia y cuyo papel le ha valido el segundo premio Gran Vía de su carrera, los Goya del teatro musical. El domingo actuó en el Teatro Colón de A Coruña, la ciudad en la que nació hace 37 años y donde recuerda haber ido con sus padres de pequeño al estreno de la película ET, y decidió quedarse unos días para estar con la familia. No pudo recoger el galardón que le concedieron la noche del lunes en el teatro Calderón de Madrid.

-¿Cómo se enteró de que era el ganador?

-Creamos un grupo en WhatsApp con la gente de la compañía que fue a la gala y los que, como yo, no pudimos ir. Fue interesante. Me enteré al instante. Les dije que comentasen como excusa que estaba rodando con Woody Allen, que parece más glamuroso. Me mandaron la foto con el premio.

-¿Y no le dio rabia perderse ese momento?

-Hacía tiempo que no estaba en casa con los míos y tampoco esperaba que me diesen el premio. Cuando hace 3 años me concedieron el de mejor actor de reparto por el papel de Lumier en La bella y la bestia tampoco pude acudir. Las veces que he ido no me lo dieron, así que creo que no voy a ir nunca más [se echa a reír].

-¿Qué diferencia existe entre una actor de cine o televisión y uno de musical?

-En nuestro caso hay que dominar tres disciplinas, que son interpretación, canto y baile, saber moverse sobre el escenario. Yo tuve la suerte de que cuando hace 15 años salí de la Escuela de Arte Dramático me había preocupado de formarme en todas ellas y entonces había menos gente preparada. En el teatro se te tiene que ver, mientras que en la tele la cámara te busca.

-¿Los premios ayudan a seguir teniendo trabajo?

-Sí, siempre son un aval. Y suponen un reconocimiento a mi carrera, a estar ahí, al compromiso con este género. Me siento orgullosísimo de estar en la cúspide, en la punta del iceberg. Espero seguir teniendo oportunidades.

-¿Lo vienen a llamar o tiene que buscar los papeles?

-Normalmente se ponen en contacto contigo a través de la productora con la que trabajas, aunque en el caso de Forever young me presenté al casting cuando vi que lo publicaban en Internet porque me apetecía hacer algo más teatral, más familiar, que no tuviese que ver con los grandes montajes. Fue un amor a primera vista y, de hecho, los de Tricicle también ganaron el premio a la mejor dirección.

-Llevan año y medio de gira y todavía les restan muchas actuaciones. En noviembre estarán en Valencia, después en Alicante. En enero vuelven a Madrid. ¿No hay crisis en el musical?

-Todos sabemos que hoy en día las cosas en España están mal, pero el musical continúa gozando de una buena salud y todavía no le llegó la crisis. Esperemos que se pueda decir lo mismo el año que viene, y del resto de las actividades culturales, también.

-Para el «Rey León», por ejemplo, las entradas ya están agotadas hasta las próximas Navidades.

-Los grandes títulos funcionan siempre bien. Parece que la gente va porque se se aparta de la realidad que esta viviendo durante un par de horas y se relaja viendo y escuchando un espectáculo. A lo mejor por eso casi nunca hay butacas libres.

-¿Cuando tendrá en sus manos el premio?

Este sábado actuamos en Móstoles y me lo dará mi compañero Jacobo Dicenta, que me dijo que lo tiene bien guardado.

armando pita ganador del premio gran vía al mejor actor de teatro musical