Una ecoplanta anhelada

María Xosé Blanco Giráldez
m. x. blanco RIBEIRA / LA VOZ

FIRMAS

La planta de transferencia recibió los primeros residuos en junio del 2000.
La planta de transferencia recibió los primeros residuos en junio del 2000. carmela < / span>queijeiro< / span>

La nave de Boiro posibilitó, junto con el complejo de Servia, el sellado de los basureros

06 sep 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

A día de hoy es una nave en la que se acumulan los residuos de parte de los municipios barbanzanos para su posterior traslado a Cerceda, pero la ecoplanta situada en el polígono de Espiñeira jugó un papel decisivo en el proceso de erradicación de los vertederos municipales. Boiro siempre estuvo en el punto de mira de la Xunta como lugar de ubicación de esta infraestructura.

De hecho, La Voz ya publicaba tal día como hoy, en 1988, la siguiente información: «La Xunta señala a Boiro como centro comarcal para ubicar una planta de transferencia de basuras». Así figuraba en el plan autonómico de recogida de residuos sólidos urbanos, diseñado para poner fin a los basureros. La ecoplanta estaba destinada a almacenar la basura de Boiro, Ribeira, A Pobra, Rianxo, Porto do Son, Noia, Lousame y Outes. No se preveía entonces el plan de compostaje que algunos de estos concellos sacaron adelante.

El plan de la Xunta tardó en materializarse, pues la ecoplanta de Boiro no entró en funcionamiento hasta finales de junio del año 2000.