Busca, desde la moderación, reformar las leyes de propiedad intelectual
06 feb 2012 . Actualizado a las 11:49 h.Por el convulso océano de Internet, en medio de la tormenta desatada por el cierre de Megaupload navega desde el 26 de enero el partido Piratas de Galicia, cuyas siglas son PIRATA.GAL. La asamblea fundacional se celebró un mes antes en Santiago, pero fue la semana pasada cuando fue admitido en el Registro de Partidos Políticos del Ministerio del Interior. Entre sus primeros objetivos está presentarse a las próximas elecciones autonómicas.
Según los estatutos que se recogen en su web (http://piratasdegalicia.org), «é un partido político español con ámbito na comunidade autónoma de Galicia, herdeiro da ideoloxía do Partido Pirata de Suecia (obtuvo dos escaños en el Parlamento europeo en las elecciones del 2009) e que procura a reforma das leis de propiedade intelectual e industrial e avoga pola democracia directa e a defensa dos dereitos humanos». Su credo es la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
Megaupload
La denominación de este nuevo partido gallego puede llevar a engaño, pues, pese a lo que sugiere su nombre, está en contra de la habitualmente conocida como piratería en Internet. «Y tampoco defendemos la existencia de páginas como Megaupload, aunque rechazamos de plano la forma en que se cerró, sin un juez», en palabras de Rafael Couto (a la izquierda en la foto), secretario legal de un partido «asambleísta, no presidencialista», que tuvo que designar cabezas visibles «porque así lo exige la ley de partidos». Igualmente están «en contra de cualquier ilegalidad en Internet, como «las acciones de Anonymous, que entendemos pero no compartimos». Saben que el término pirata «suena fuerte», pero decidieron mantenerlo tras largos debates «porque resulta un gancho eficaz, una ventaja».
¿Qué buscan entonces? En síntesis, su ideario proclama que la cultura debe ser un bien universal al alcance de todos, pero también que «se debe respetar al artista y reportar al autor» el valor de su trabajo. Desde este planteamiento «apoyamos cualquier iniciativa intermedia y huimos de los extremos. Rechazamos -prosigue Couto- que se piratee y todo sea gratis, pero también el actual sistema, basado en soportes (cedés y deuvedés) y en el poder de los distribuidores».
Consideran que la industria audiovisual debe «espabilar y hacer suyo el negocio que ahora tienen los de la manzanita mordida», que permite ofrecer contenidos a un precio razonable, aunque apuestan preferentemente por un modelo sin soportes, «directo desde el creador hasta el usuario, sin intermediarios que nos digan qué música tenemos que escuchar».
Otra de sus luchas políticas será la de velar por que se erradiquen las diferencias territoriales «y que Galicia tenga garantizado el mínimo legal de un megabit de conexión a partir del 2014». El uso de software libre en la Administración y la lucha contra las patentes será otro caballo de batalla político de este colectivo cuyos gastos, como el de la notaría, salen por ahora del bolsillo de sus fundadores.
Canalizar las denuncias surgidas en Galicia contra el Gobierno estadounidense por el cierre de Megaupload, una acción que aglutina a nivel estatal el Partido Pirata de Cataluña, será una de sus primeras actuaciones.