Un 58 % de los voluminosos retirados este verano corresponden a vertidos incontrolados
02 ago 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Colchones, somieres, mesillas y armarios destartalados, electrodomésticos viejos... con la llegada del verano son muchos los que aprovechan para «hacer limpieza» y tirar, nunca mejor dicho, media casa a la basura. La llegada de veraneantes multiplica en Valdoviño la presencia de voluminosos junto a los contenedores callejeros y las aceras. Un problema que se agrava porque buena parte de los vecinos se deshace de estas pertenencias sin avisar al servicio municipal de recogida.
En lo que va de año, el Concello retiró de las calles y caminos de la localidad nada menos que 121 toneladas de enseres y muebles. Una cifra que da cuenta de la envergadura de este problema ambiental. Y el 30 % de lo recogido se hizo sin que los particulares llamaran al teléfono habilitado por el ayuntamiento para avisar del depósito.
El problema se extiende por toda la localidad, perjudicando de forma notable la imagen de muchos espacios públicos. No obstante, como apuntan desde el Concello, afecta especialmente a los núcleos urbanos de Valdoviño y de Meirás, «así como a explanadas con espacio para aparcamiento, próximas a las carreteras principales», explica el edil de Obras y Servicios, Benito Vega.
«Solo después de la Fiesta del Porto se retiraron de esa zona de Meirás, más de 40 sillones» (1,9 toneladas de muebles), relata el concejal, quien subraya además que durante los meses de junio y de julio se retiraron 43.720 kilos de voluminosos. Y añade que en estos dos meses los vertidos realizados sin control alcanzaron el 58 %.
Ante esta avalancha, desde el el Concello se ha contratado un contenedor de obra para reducir los viajes hasta la planta ferrolana de Rilo, a donde se llevan los voluminosos. Y está previsto activar una campaña a través de la web y las redes sociales municipales para promocionar el servicio de recogida gratuito y solicitar a los vecinos que colaboren en la gestión de los voluminosos, y la conservación de la vía pública, evitando estampas que dañan la imagen del municipio. Algo que solo requiere una llamada de teléfono al 981 382 310.
¿Sanciones? Están recogidas en la ordenanza, aunque reconocen desde el Concello la dificultad de «pillar a los infractores», dada las limitaciones de la plantilla de la policía local y la propia extensión de la localidad. «Ojalá cogiéramos a alguien in fraganti», concluye el edil, quien subraya el esfuerzo económico -88,70 euros por tonelada- que implica la gestión de los voluminosos.