«Desesperación» entre hosteleros de Neda; y Mugardos y Valdoviño, en nivel medio

M.A. / C. L. FERROL

NEDA

Jorge Basoa, propietario del establecimiento de hostelería La Flor de Mayo, ubicado en Neda
Jorge Basoa, propietario del establecimiento de hostelería La Flor de Mayo, ubicado en Neda JOSE PARDO

Los restantes municipios del área de Ferrol pasan al nivel bajo

18 mar 2021 . Actualizado a las 09:27 h.

Las nuevas medidas para tratar de contener el covid-19 sitúan a los concellos del Área Sanitaria de Ferrol en tres niveles de restricciones. Neda sube al nivel alto, por lo que la hostelería solo puede abrir las terrazas al 50 %; Mugardos y Valdoviño siguen en el medio, con aforos del 30 % en el interior y 50 % en las terrazas; y los restantes municipios descienden al bajo, con aforos del 50 % dentro y del 75 % en el exterior.

Será a partir de las 00.00 horas de mañana, viernes, cuando entren en vigor y cuando el Concello de Neda quedará con las restricciones propias del nivel alto que limitan la actividad económica y social. Los 16 casos de covid en las últimas dos semanas han derivado en esta situación que solo afecta a un puñado de concellos gallegos, pero que causa pesimismo en las empresas y negocios locales. «Están enfadados y desesperados; es normal, pero no solo los hosteleros, también gente del deporte o el sector de las atracciones de feria», dijo ayer el alcalde de Neda, Ángel Alvariño, ante las medidas que están a punto de entrar en vigor. El regidor indicó que los responsables sanitarios confirmaron que no hay transmisión en el municipio y que los casos «se concentran en unas familias». «Realmente no vemos peligro sanitario, por tanto el posicionamiento de los hosteleros es totalmente razonable, pero por otra parte están los responsables sanitarios, que tienen que establecer criterios uniformes y a veces choca con estas circunstancias», valoró el alcalde. «El Sergas se basa en un porcentaje, y un ayuntamiento como este de 5.000 habitantes, con diez casos está prácticamente confinado», apuntó Alvariño, que confía en que la próxima semana se rebaje el nivel de alerta.

Hosteleros locales como Óscar Ríos, de O Lagar, opinan que «es injusto que nos cierren porque el brote está muy localizado». Esta noche, Óscar bajará la persiana hasta que se levanten las restricciones, porque con las previstas «no da para cubrir gastos».

Jorge Basoa, de La Flor de Mayo, ubicado en la frontera entre Narón y Neda, seguirá abierto al tener servicio de sellado de loterías, aunque perderá su clientela del municipio vecino. «Estamos hartos», sentencia.