La ferrolana Vanessa, expulsada de «GH Dúo» por su atracción fatal con Javi: «Eres al que más quiero en mi vida»

Patricia Hermida Torrente
P. Hermida FERROL / LA VOZ

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Vanessa Bouza, de nuevo expulsada de un concurso de Gran Hermano, junto a su marido Javi Mouzo
Vanessa Bouza, de nuevo expulsada de un concurso de Gran Hermano, junto a su marido Javi Mouzo Telecinco

El 74 % dictó veredicto contra la cantante de orquesta, que esta vez animó a su marido a continuar en el concurso de Telecinco

10 ene 2025 . Actualizado a las 12:04 h.

Al igual que Glenn Close por su papel en Atracción fatal, la ferrolana Vanessa Bouza se habría merecido un Oscar en su paso por Telecinco... pero no lo ganó. La cantante de orquesta lo intentó de mil maneras: se plantó rubísima en Guadalix, estrenó nueva nariz para entrar en GH Dúo, abordó a su marido Javi Mouzo como a un atribulado Michael Douglas, solo le faltó meter un conejo en olla hirviendo (guiño solo apto para seguidores de la película ochentera). Pero la audiencia volvió a dictaminar con el pulgar hacia abajo contra Vanessa, convirtiéndose anoche en la primera expulsada con un 74 % de los votos. 

El público prefirió mandar a la concursante gallega a su casa de Sequeiro (Valdoviño), y apostar por la continuidad de los también nominados Ana Herminia (mujer de Ángel Cristo Jr.) y Álex Guita (exnovio de Adara Molinero, también famosa por sus incursiones televisivas). Como novedad, en esta ocasión Vanessa tuvo el detalle de permitir la continuidad en el concurso de su marido. Cuando fue expulsada del Gran Hermano clásico (el de anónimos), directamente lo obligó a salir tras protagonizar ambos una edición tan tórrida como reñida (incluyendo un surtido de aparatología erótica, bien surtida de pilas). Pero anoche solo tuvo palabras de amor para Javi: «Solo te puedo pedir perdón si alguna vez te he hecho daño, que han sido muchas, vas a ganar Gran Hermano, eres mi bastón y lo más bonito del mundo». La retahíla de piropos, al más puro estilo Romeo y Julieta de William Shakespeare pero bien de gloss en los labios, continuaba así: «Javi, no cambies nunca, siempre estaré contigo». 

Gran concursante de Gran Hermano, le pese a quien le pese, Vanessa también lloró arrepentida de las discusiones que tuvo con Javi (al que agotó noche sí y noche también, según palabras textuales del también cantante que en esta edición optó por la abstinencia monacal). Pero sobre todo deseó la continuidad de su marido, al que quiere convertir ganador (deseo compartido por buena parte del personal de Telecinco y de los devotos espectadores): «Eres una gran persona, al que más quiero en mi vida, llevamos 14 años juntos». Y él admitía una verdad como un templo: «La quiero demasiado». Solo les faltó dedicarse aquellas palabras del bardo de Avon: «¡Oh! ¡Habla otra vez, ángel resplandeciente!… Porque esta noche apareces tan esplendorosa sobre mi cabeza como un alado mensajero celeste». O como cantaban Sonia y Selena: «Fuego en mi cuerpo, música y pasión, te tengo en mi mente, pura obsesión (yo quiero bailar, toda la noche)».