Selectividad en Ferrol: «En otras comunidades es una broma, pero aquí no»

FERROL

La primera jornada de las pruebas se está desarrollando con muchos nervios pero sin incidencias

13 jun 2019 . Actualizado a las 09:57 h.

Un artículo de Almudena Grandes sobre la violencia machista o un texto de Antonio Muñoz Molina sobre Trump y la libertad de expresión. La Fundación, de Antonio Buero Vallejo, o La verdad sobre el caso Savolta, de Eduardo Mendoza. Y la narrativa hispanoamericana de la segunda mitad del siglo XX o la poesía de Antonio Machado y Juan Ramón Jiménez. Estos fueron los grandes dilemas a los que se tuvieron que enfrentar esta mañana los alumnos de la selectividad en el primer combate de la temida prueba de acceso a la Universidad. Elegir entre la opción A o la B en el examen de Lengua y Literatura Castellana. Y una vez hecho esto, estar seguros de no haber errado en la elección.

Recién acabada la prueba, en los pasillos de la Politécnica de Esteiro nadie se pone de acuerdo sobre cuál era más fácil, pero todos coinciden en que el examen no resultó tan complicado como esperaban. «La verdad es que no ha ido mal, podía haber sido mucho peor», comenta aliviada Pepa, una joven que sueña con estudiar el grado de Liderazgo Emprendedor e Innovación en la Universidad de Mondragón. Sus compañeras del Tirso de Molina, sentadas a su alrededor con los apuntes de Historia de España en la mano -es el siguiente examen que toca tras el primer descanso de la mañana- le dan la razón sobre la dificultad de la prueba y aprovechan la ocasión para manifestarse sobre la gran polémica que este año sobrevuela la selectividad: ¿Debería haber un único examen para toda España o debe seguir siendo diferente en cada autonomía?

«Pues claro que debería haber un solo examen. En algunas comunidades, como Canarias o Andalucía, la selectividad es una broma, pero aquí no, y eso es una injusticia», comenta indignada una compañera de Pepa.

No lejos de allí, Álvaro, del Saturnino Montojo expresa la misma opinión, aunque reconoce que es complicado luchar contra las desigualdades. «Sin salir de Galicia también se dan, porque hay centros que hinchan las notas de bachillerato de sus alumnos y suben así su nota media para acceder a la Universidad y otros que no lo hacen», dice este joven que aspira a entrar en el nuevo grado de Ingeniería Robótica que la Politécnica de Lugo empezará a impartir el próximo curso 2019-2020.

Con nervios, pero sin incidencias

Salvo algún que otro olvido del DNI que se solventó enseguida gracias a la veloz respuesta de los familiares, la primera jornada de los exámenes se está desarrollando sin incidencias en las dos escuelas politécnicas de Ferrol, donde este año se examinan de las pruebas más de seiscientos alumnos de la comarca.

Lo que sí que hubo, en cambio, fueron muchos nervios. Y si alguien intentó copiar es casi seguro que no lo consiguió, porque las normas siguen siendo muy estrictas. «Los alumnos no pueden acceder al aula con móviles ni relojes inteligentes, aunque los pueden tener en las mochilas apagados,  pero es que este año, además, se van a realizar escaneos de forma aleatoria en las aulas para verificar que no hay transmisión ni recepción de datos a través de ese tipo de dispositivos», explica Álvaro Deibe, presidente de la comisión delegada de la Politécnica de Esteiro.

Las pruebas de selectividad continuarán con más exámenes mañana, jueves, cuando muchos las darán por terminadas, mientras que otros podrán presentarse el viernes a más materias optativas para subir nota.